United States of America
Respuestas ofrecidas por la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores ruso, María Zajárova, a las preguntas de los medios sobre las declaraciones de Henry Kissinger y el senador Lindsey Graham
Pregunta: ¿Qué opina de las declaraciones del ex Secretario de Estado, Henry Kissinger, que de hecho apoyó la línea de la Casa Blanca sobre Ucrania, de que "el conflicto ya está resuelto" en términos de impedir un ataque ruso contra los países europeos aliados de EEUU?
Respuesta: Ciertamente, Henry Kissinger, como patriarca de la diplomacia estadounidense que generalmente abrazaba el "realismo geopolítico" en su expresión pragmática y francamente cínica, es conocido por sus valoraciones no convencionales. Habiendo cruzado la marca del siglo, no se traiciona a sí mismo, expresando pensamientos contrarios a la agenda impuesta por la camarilla liberal-globalista, que hoy manda con autoridad en el llamado Occidente colectivo.
En particular, Kissinger no tuvo miedo de declarar públicamente que "la propuesta de aceptar a Ucrania en la OTAN fue un grave error" que provocó el conflicto. Aunque añadió que en las circunstancias actuales era mejor que el país estuviera en la Organización. Pero en lo esencial, debo admitir, no se desvió de la línea general de la actual Administración estadounidense, basada en el imperativo de infligir una derrota estratégica a Rusia. Al igual que el resto de la élite estadounidense y los expertos a su servicio, está bajo la ilusión de una victoria rápida y en la falsa creencia de que Moscú aceptará un acuerdo bajo el escenario occidental, que según la versión del ex Secretario de Estado implicaría un favor de mantener Sevastópol como parte de Rusia.
Este parece ser un caso en el que un realista acérrimo niega la realidad simplemente porque no permite que exista. Sugerir que los rusos iban a atacar Europa del Este, y Suecia y Finlandia al mismo tiempo, es ridículo. Mientras tanto, es precisamente la alianza entre Rusia y China, cuando las dos grandes potencias se enfrentan codo a codo contra EEUU, lo que define hoy la corriente principal de la geopolítica moderna.
De ahí, por cierto, se deriva la política de la Administración Biden de doble contención tanto de Moscú como de Beijing, desastrosa para la hegemonía estadounidense. En términos de la Doctrina Kissinger, esto es una pesadilla viviente. Pero la cuestión no se plantea en ese plano, sino que se hace hincapié en el hecho de que Rusia está casi acabada, y será posible abordar de cerca a China. Se trata de un delirio peligroso para EEUU, pero objetivamente beneficioso para nosotros. Porque la victoria será nuestra.
Pregunta: El senador republicano Lindsey Graham ha vuelto a distinguirse con un comentario extremadamente rusófobo. Tales revelaciones monstruosas en su forma y contenido se están convirtiendo en una norma para EEUU. Nos gustaría escuchar una evaluación sustantiva suya.
Respuesta: Conocemos muy bien a este personaje, grotesco y peligroso al mismo tiempo. Los órganos de investigación rusos le han estado vigilando de cerca, investigando sus llamamientos anteriores para eliminar al Presidente ruso y a derribar aviones rusos sobre el Mar Negro.
Pero el senador siguió adelante, arremetiendo contra todo el pueblo ruso. Las excusas patéticas sobre las frases supuestamente sacadas de contexto y montadas por sus subordinados en el régimen de Kiev de que "los rusos están muriendo" y, por lo tanto, EEUU "nunca ha invertido dinero con tantos beneficios", no cambian la esencia del asunto.
Este es el enfoque occidental por excelencia respecto a Rusia, que "debe ser destruida". Hitler y sus compinches razonaban así en el pasado, y hoy los neonazis ucranianos siguen sus pasos, patrocinados por Washington, Londres y Bruselas. Ya hemos comentado las declaraciones de Graham, subrayando que tales inversiones en la primera mitad del siglo XX, incluso por parte de EEUU, llevaron a la Segunda Guerra Mundial y al Holocausto.
Ahora, el senador Graham se limita a reproducir lo que varios políticos estadounidenses tienen en mente, sin ambages y lo más desnudo posible. Parece que hace tiempo que es necesario y merecido que se le busque y se le lleve ante la justicia.