ONU
Agravamiento de la situación financiera de la ONU
COMUNICADO DE PRENSA
Estos días, el Secretario General de la ONU, António Guterres, dio parte a los representantes del cuerpo diplomático neoyorquino sobre el agravamiento de la situación financiera de la ONU.
Al 9 de octubre de 2019, más de 50 Estados miembros no aportaron al presupuesto de esta Organización mundial sus cuotas correspondientes al año corriente. De este modo, ya en noviembre, la Secretaría de la ONU podrá enfrentarse con serias dificultades con la retribución del trabajo de sus empleados y el pago de facturas presentadas por los proveedores de artículos y servicios. El Departamento de la Asamblea General y de Gestión de Conferencias, que es la unidad clave de la Secretaría, se ve obligado a recurrir a adoptar medidas de austeridad. A partir de mediados de este mes de octubre, el Consejo de Seguridad y la Asamblea General podrán celebrar sólo dos sesiones al día: desde las 10:00 hasta las 13:00 y desde las 15:00 hasta las 18:00, mientras antes los diplomáticos a menudo se reunían en horas de noche. El volumen de documentos a ser traducidos a los seis idiomas oficiales será reducido. La ONU asimismo ahorrará los gastos en la electricidad, el aire acondicionado y la protección de los locales.
Cabe señalar que últimamente, el principal deudor es EEUU. Su deuda contraída con el presupuesto regular de la ONU ya sobrepasó mil millones de dólares. Están a la vista los evidentes intentos de Washington por socavar la labor de la ONU: a la par con una impredecible y preconcebida política en materia de otorgamiento de visados estadounidenses a los miembros de las delegaciones, se ponen en juego también palancas financieras.
Rusia, en cambio, figura entre los pagadores de buena fe. Cumplió oportunamente con todos sus compromisos financieros y abonó en pleno volumen todas sus cuotas. Moscú tradicionalmente invita a otros Estados miembros de la ONU a dar muestras de autodisciplina presupuestaria.