El año 2017 estuvo marcado por el 75 aniversario del establecimiento de relaciones diplomáticas entre Rusia y Australia. Las décadas pasadas han estado repletas de eventos memorables y brindado numerosos ejemplos de la puesta en común de esfuerzos en beneficio de nuestras naciones.

La historia de los contactos de Rusia con el continente australiano se remonta siglos atrás. El 16 de junio de 1807 en Port Jackson (hoy ciudad de Sídney) atracó, para reabastecerse de víveres y agua potable, la balandra de guerra rusa Neva. Ese mismo año, el joven oficial Lachlan Macquarie, quien más tarde sería uno de los políticos más destacados de Australia y gobernador de la colonia de Nueva Gales del Sur, viajando en misión diplomática de Australia a Londres, visitó Bakú, Astracán, Moscú y San Petersburgo. Entre 1807 y 1835 Port Jackson y Hobart acogieron un total de 15 barcos rusos, incluidos los navíos en los que los célebres navegantes rusos Fadéi Bellingshausen y Mijaíl Lázarev se dirigían a explorar la Antártida.

A mediados del siglo XIX empezó a crecer en Australia el número de inmigrantes rusos. A fin de proteger sus intereses, en 1957 en Melbourne y Sídney se abrieron misiones consulares de Rusia y fueron nombrados cónsules honorarios los comerciantes australianos James Damyon y Edmund Paul. Posteriormente, el Imperio Ruso designó cónsules honorarios en Adelaida, Brisbane, Port Elizabeth, Hobart y Perth. En 1894 el consulado honorario de Rusia en Melbourne se transformó en consulado.

El 10 de octubre de 1942, en Londres fue firmado el acuerdo de establecimiento de relaciones diplomáticas entre la URSS y Australia. El 2 de enero de 1943, un grupo de diplomáticos australianos llegó a la Ciudad Kúibishev (hoy Samara) para establecer la Embajada que se inauguró el 26 de enero coincidiendo con el Día de Australia. La misión diplomática soviética se instaló en Canberra en 1943.

Rusia recuerda el apoyo brindado por los australianos a nuestro país en los duros años de la guerra contra el nazismo. En Australia se llevó a cabo una extensa campaña bautizada "Piel de cordero para Rusia" que permitió que los soldados soviéticos recibieran unos cuatrocientos mil abrigos de piel de cordero desde el país continente y que además se enviaran unos cuarenta contenedores de medicamentos y equipos médicos a los hospitales. Los convoyes de los aliados en los que participaron pilotos y marineros australianos desempeñaron un papel importante en la derrota del nazismo. Sus méritos les valieron la condecoración de la Medalla de Ushakov, así como medallas conmemorativas de distintos aniversarios de la Victoria en la Gran Guerra Patria de 1941-1945.

Durante el período de la Guerra Fría los dos países mantuvieron relaciones de respeto mutuo intercambiando mensajes al más alto nivel sobre problemas actuales de la seguridad internacional, incluido el desarme nuclear. Se firmaron el Tratado Comercial (1965) y una serie de otros documentos intergubernamentales. En 1975, por primera vez en la historia de las relaciones bilaterales, Rusia recibió la visita de un primer ministro australiano, Gough Whitlam. Diez años después, el comercio entre ambas naciones alcanzó una cifra récord al superar los 1.000 millones de dólares australianos.

Hoy en día, el diálogo político bilateral continúa, incluyendo al más alto nivel. El Presidente de la Federación de Rusia, Vladímir Putin, se entrevistó con el Primer Ministro de Australia, Malcolm Turnbull, en los márgenes de las cumbres del G20 en Antalya (noviembre de 2015) y Hangzhou (septiembre de 2016), así como en el foro APEC en Lima. Aunque, naturalmente, los dos países no siempre coinciden en sus enfoques sobre distintos asuntos, Rusia está dispuesta a profundizar la cooperación sobre la base del respeto mutuo, el reconocimiento de la supremacía del derecho, la no injerencia en los asuntos internos y la consideración de los intereses del otro.

Continúa mejorando el marco legal de las relaciones bilaterales, estando vigentes los convenios  de doble imposición (2000), de cooperación en el ámbito  de la exploración y utilización del espacio ultraterrestre con fines pacíficos (2001) y de cooperación en el uso de la energía nuclear con fines pacíficos (2007) .

Vemos un potencial significativo para incrementar la interacción en materia de comercio e inversiones. En los últimos años, se está intensificando la cooperación en el sector de la minería. La compañía rusa OK Rusal trabaja con éxito en el mercado australiano, mientras las mineras australianas BHP Billiton, Rio Tinto, WorleyParsons y la corporación Orica cooperan con Rusia. La australiana Tigers Realm Coal y su socio ruso Compañía del Carbón del Pacífico Norte están explotando conjuntamente la mina de carbón de coque de Amaam, en el distrito autónomo ruso de Chukotka.

Van avanzando los lazos entre los dos países en materia de cultura y Humanidades. En  los últimos dos años, han actuado en Australia famosos músicos rusos como Maxim Venguérov o Denís Matsúiev, y ha estado de gira el director Valeri Guérguiev al frente de la Orquestra Sinfónica de Londres. Los pianistas rusos Andréi Gugnín y Arseni Tarasévich-Nikoláiev han sido premiados por el Concurso Internacional de Sídney. El festival de cine anual "Renacimiento Ruso", que en 2016 se celebró con éxito en cinco ciudades australianas –Brisbane, Canberra, Melbourne, Perth y Sídney–, sigue siendo un evento destacado. El Museo Estatal del Hermitage, responsable de exposiciones como "Alejandro Magno" (2013) y "El legado de Catalina la Grande" (2015), es un invitado habitual y bienvenido en Australia.

Rusia concede todos los años becas estatales a ciudadanos australianos para que cursen estudios en sus universidades. Algunos de los principales centros de enseñanza superior de los dos países, como la Universidad Estatal Mijaíl Lomonosov de Moscú, la Universidad Minera de San Petersburgo o la Universidad de Nueva Gales del Sur, realizan programas de cooperación e intercambio de estudiantes.

En distintos momentos de la historia Australia ha sido lugar de residencia de muchos rusos destacados, incluido el antropólogo y etnógrafo de fama mundial Nikolái Miklujo-Maklái. En la actualidad en Australia residen más de 100 mil de compatriotas rusos, existen medios impresos y digitales en idioma ruso, se celebran festivales de la cultura rusa.

Rusia y Australia interactúan en el ámbito internacional, en primer lugar en la región Asia-Pacífico, que aumenta sin cesar su papel en la política y la economía global. Moscú tiene interés en ampliar el diálogo con Canberra –un miembro activo de muchas asociaciones regionales– en interés de garantizar la estabilidad y el desarrollo sostenible en la región Asia-Pacífico y de lograr una arquitectura regional de seguridad igual e indivisible basada en enfoques no alineados. Estamos dispuestos a intensificar la colaboración para dar respuestas eficaces a numerosos desafíos y amenazas, incluidos el terrorismo y el extremismo, desde el respeto a las normas y principios fundamentales del derecho internacional y al papel coordinador central de la ONU.

Estamos convencidos de que se dan las premisas necesarias para llevar los lazos ruso-australianos a un nuevo nivel en beneficio de los pueblos de nuestros países y en aras de fortalecer la estabilidad y la seguridad regional y global. Es cuestión de ponerlas en práctica.