Los Estados Unidos Mexicanos
Exposición virtual de documentos de archivo dedicada al 130º aniversario del establecimiento de relaciones diplomáticas entre Rusia y México
El artículo del Ministro de Asuntos Exteriores de la Federación de Rusia, Sergei Lavrov, dedicado al 130º aniversario del establecimiento de relaciones diplomáticas entre Rusia y México
Rusia y México: unas relaciones enfocadas al futuro
El 11 de diciembre Rusia y México celebran una fecha memorable, el 130º aniversario del establecimiento de relaciones diplomáticas. En 1890 se abrió un capítulo nuevo en nuestra historia compartida. En los decenios pasados los vínculos bilaterales, basados en los sentimientos de una simpatía mutua de pueblos y entrelazamiento de culturas, fueron enriquecidos por una estrecha cooperación económica, la aspiración recíproca para construir una asociación de respeto mutuo e igualdad en derechos con fundamento en la cercanía de intereses políticos, referencias morales y valores.
Sin embargo, nuestra interacción práctica inició mucho más antes. El Imperio Ruso, que poseía territorios en América del Norte, desarrolló un interés activo por México, que formaba parte de Nueva España, aún en los albores del siglo XIX. La Compañía Ruso-Americana que comerciaba en aquel entonces realizó varias expediciones a la región. En 1812 casi a la entrada de las posesiones españolas quedó fundado Fort Ross. Aunque los primeros contactos con los mexicanos eran esporádicos, esa vecindad consolidó la aspiración de entendernos mejor, depositó los cimientos para seguir acercándonos.
Otra etapa se inició en el transcurso de la lucha del pueblo mexicano para liberarse de la opresión colonial. Después de que México obtuvo su independencia en 1821 nuestras naciones a lo largo de dos decenios, en esencia, tuvieron una frontera común trazada por la línea de la bahía Rumiantsev (hoy día, la Bodega), al norte del cual hasta 1841 se extendían las posesiones de Fort Ross.
A finales de los años 20 – a inicios de los años 30 del siglo XIX representantes de Rusia y México llevaron a cabo una serie de negociaciones respecto a la posibilidad de celebrar un acuerdo comercial e intercambiar misiones. La emigración rusa a la región en gran medida contribuyó a que se profundizaran los contactos entre ambos pueblos. Para muchos connacionales rusos que se fueron al Nuevo Mundo para construirse una vida nueva, México se convirtió en la segunda casa.
Simbólicamente los destinos históricos de Rusia y México comparten muchos rasgos similares. En algún sentido incluso navegamos por rumbos paralelos. Nuestros países vieron grandes revoluciones sociales (en 1910 en México y en 1917 en Rusia). México fue el primer país del continente americano en reconocer el joven Estado soviético y establecer relaciones diplomáticas con la URSS en 1924.
Una gran influencia fue ejercida por el arte de la vanguardia y revolución rusa sobre el muralismo mexicano. El poeta Vladimir Mayakovsky visitó México y era amigo de Diego Rivera. El director de cine Sergei Eisenstein, cuyas películas se admiran por el espectador mexicano hasta hoy, estuvo en el país latinoamericano rodando la cinta ¡Qué viva México! El país azteca se convirtió en la segunda patria para el pintor Vladimir Kibalchich. Hoy en la ciudad de Mérida funciona el Centro de Estudios Mayas que lleva el nombre del científico Yuri Knórozov quien inventó la llave para descifrar la antigua escritura maya.
Este año se celebra el 75º aniversario de la terminación de la Segunda Guerra Mundial y la fundación de la Organización de Naciones Unidades. Guardamos con esmero la memoria de que en los años arduos de la violente lucha contra el nacismo México nos apoyó. El escuadrón 201 de la Fuerza Aérea Mexicana, más famoso como los Águilas Aztecas, batalló en el teatro de combates del Pacífico contra el Japón. Después de la Victoria laboramos junto con México para construir un mundo de la postguerra cuyo fundamento fue cimentado por la Carta de la ONU.
En este periodo las relaciones bilaterales se ampliaron notablemente. Se produjo una activación sustancial de los intercambios culturales y científicos.
La terminación de la guerra fría, la desintegración de la URSS y los dramáticos cambios en el ámbito internacional en los 1990 han sido una prueba de resistencia para los vínculos ruso-mexicanos. Hoy se puede decir con seguridad que nuestros países pasaron esa prueba con éxito, fortaleciendo su papel como importantes centros de política mundial.
En el siglo XXI Rusia y México intervienen como socios naturales en los asuntos globales. Vemos en México un actor fuerte y con iniciativa en los niveles regional e internacional, que tiene una voz independiente a la hora de resolver problemas de mantenimiento de estabilidad y seguridad global. Estamos unidos por ser comprometidos firmemente a la supremacía del derecho internacional y fortalecimiento del papel protagónico de la ONU en la resolución de problemas mundiales, el rechazo de enfoques unilaterales, la opción a favor de las vías políticas y diplomáticas del arreglo a las crisis y los conflictos.
El marco de nuestra interacción en la etapa contemporánea está determinado por la Declaración sobre los principios de las relaciones y cooperación, firmada en 1997. Los lazos ruso-mexicanos se construyen a partir de una filosofía política compartida con base en un entendimiento de que no hay alternativas a un orden multipolar, protección y consolidación de la soberanía nacional, respeto al equilibrio de intereses en las relaciones internacionales. No nos intervenimos en los asuntos internos y no nos imponemos actitudes, trátese del diálogo bilateral o formatos multilaterales.
Partiendo de esos entendimientos básicos, avanzamos mucho en consolidar el tejido de nuestros lazos, la importancia medular para los cuales tienen los contactos a nivel más alto. En los últimos 20 años, el Presidente de Rusia, Vladímir Putin, visitó México en dos ocasiones, mientras que los mandatarios mexicanos realizaron tres visitas a Rusia.
Un diálogo constructivo y franco entre nuestras Cancillerías permite resolver problemas emergentes y coordinar nuestros enfoques en el ámbito internacional. Rusia y México cooperan fructíferamente en la ONU, el G20, la APEC y otros foros y organizaciones internacionales y regionales. Esperamos que nuestros contactos sean aún más substanciales, teniendo en cuenta el trabajo conjunto que nos espera en el Consejo de Seguridad de la ONU y el Consejo de Derechos Humanos de la ONU.
Apreciamos la contribución de México al fortalecimiento de los procesos de integración en la región de América Latina y el Caribe. Quisiera destacar su papel proactivo en la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), donde México mantiene su presidencia pro tempore en 2020-2021. Estamos dispuestos a reanudar los contactos regulares entre Rusia y CELAC.
Un componente importante del diálogo entre nuestros Estados son los lazos interparlamentarios por conducto de los Grupos de Amistad en ambas Cámaras de nuestros parlamentos, así como vínculos en el formato multilateral, en el marco de la Unión Interparlamentaria, el Foro Parlamentario de Asía-Pacífico y el Foro Consultativo de Presidentes de Parlamentos de los países miembros del G20.
Colaboramos de manera exitosa sobre los problemas que afectan a toda la humanidad: la seguridad global y regional, la lucha contra el terrorismo internacional, el cambio climático y el desarrollo sostenible. Nuestros socios mexicanos nos apoyan en los carriles tan importantes como las medidas de transparencia y fomento a la confianza en el espacio, la iniciativa de no ser primeros en desplegar armas en el espacio ultraterrestre, la seguridad informática internacional, la no glorificación del nazismo.
Las relaciones entre nuestros países, y eso es de suma importancia, nunca han sido empañadas por divergencias profundas. Por supuesto, podemos diferir en cuanto a ciertas cuestiones de la agenda internacional actual. Pero lo esencial es que uno respeta la postura del otro, si esta postura es independiente, consecuente y se basa en un análisis de la situación real, si está abierta al debate. Continuaremos con interés el diálogo sobre las perspectivas de desarme nuclear y el Tratado para la Prohibición de Armas Nucleares, sobre los enfoques relativos al problema mundial de drogas y el tema de derechos humanos.
A Rusia y México, nos une la cooperación multifacética en las esferas económico-comercial y de inversiones. El país latinoamericano es uno de nuestros socios principales en la región que a lo largo de muchos años ocupa el 2º lugar en términos de intercambio comercial (2,58 mil millones de dólares estadounidenses en 2019).
Nuestras economías no se compiten sino se complementan. Se están desarrollando proyectos de inversiones e infraestructura grandes, aunque por ahora “focales”. Una aportación ponderable la hacen empresas como Rosatom y Lukoil. Con la participación de Rusia fueron construidas centrales hidroeléctricas Aguamilpa y Huites, fue suministrado el equipo para las hidroeléctricas La Yeska y El Cajón. Los helicópteros de fabricación rusa que se utilizan en las operaciones de rescate, así como en la lucha contra el crimen organizado y narcotráfico, adquirieron buena reputación en el mercado mexicano. Entre ejemplos de las inversiones mexicanas en la economía rusa se puede mencionar la compañía NEMAK, que abrió en 2015 una planta de autopartes en Rusia, así como Gruma International Foods que lanzó en 2017 una planta de elaboración de productos alimenticios.
Son unas iniciativas ambiciosas e interesantes, las respaldaremos por todos los medios posibles. El potencial para el comercio e inversiones es considerable. Hay perspectivas prometedoras en la industria energética, automotriz, aeronáutica, de construcción naval, química y farmacéutica, en el transporte ferroviario, la agricultura, así como en los sectores de alta tecnología y de innovaciones. Estamos avanzando y tratamos de mantener el ritmo incluso durante la pandemia.
Un papel importante en la consolidación del marco de la colaboración material tiene la Comisión Mixta Ruso-Mexicana para la Cooperación Económico-Comercial, Científico-Técnica y Navegación Marítima copresidida por el Ministro de Trabajo y Protección Social de la Federación de Rusia, Antón Kotyakov, y la Secretaria de Economía de los Estados Unidos Mexicanos, Graciela Márquez Colín.
Consideramos como tareas principales la diversificación del comercio bilateral, el fomento a las inversiones y a los contactos directos entre los círculos empresariales de ambos países. Bajo el auspicio de la Cámara de Comercio e Industria de Rusia funciona el Comité de Empresarios Rusia–México, encabezado por el Presidente de la empresa United Aircraft Corporation, Yuri Slyusar. Se distingue la organización de misiones de negocios de las empresas rusas y mexicanas líderes en los ámbitos de maquinaria, tecnologías de información y comunicaciones, energía y medicina.
La cooperación cultural sigue siendo nuestro legado común. Entre los eventos de los últimos años se destaca una exhibición a gran escala de los cuadros de Wassily Kandinsky en la Ciudad de México. Las muestras de las obras de Frida Kahlo y Diego Rivera en Moscú y San Petersburgo (2018–2019) provocaron un gran interés del público ruso. En el marco de los programas de cooperación cultural se celebran regularmente las jornadas de la cultura de Rusia y México, actuaciones de célebres artistas, muestras y presentaciones de los museos de ambos países, conferencias científicas y festivales de cine. En el año en curso Rusia participó como país invitado de honor en la 33ª edición de la Feria Universitaria del Libro en Pachuca, que se celebró de manera digital.
Apreciamos mucho el interés de la Parte Mexicana por los intercambios estudiantiles y académicos con Rusia. Cada año nuestro país ofrece becas para que ciudadanos mexicanos puedan estudiar en universidades rusas. Con mucho gusto accederíamos a las peticiones de nuestros amigos de aumentar las cuotas de dichas becas para la formación de médicos mexicanos en nuestras universidades.
Estamos trabajando para perfeccionar la base legal de las relaciones ruso-mexicanas. Rusia está interesada en la firma de un acuerdo comprensivo sobre la supresión de visas para los viajes mutuos de ciudadanos de ambos países, lo cual sería un compromiso emblemático ante los crecientes intercambios turísticos y empresariales.
El carácter plurinacional de los dos Estados habitados por múltiples pueblos indígenas, así como la existencia de territorios remotos y poco accesibles en ambos países fomentan el interés de las ciudades y regiones por establecer lazos directos. Está en vigor el Acuerdo de cooperación entre los gobiernos de San Petersburgo y Guadalajara, en diciembre de 2019 se firmó el nuevo Programa de Cooperación entre Moscú y la Ciudad de México para 2019–2022.
La interdependencia de Estados en un mundo globalizado y las nuevas realidades relacionadas con el brote de coronavirus han subrayado el valor de ayuda mutua, la disposición de tender una mano. La intensa cooperación con México en la lucha contra la pandemia ha sido testimonio elocuente de que nuestros países están unidos por el deseo de tender puentes en vez de erigir muros, enfrentar nuevos desafíos hombro con hombro.
La gloriosa historia de los lazos ruso-mexicanos nos ha ayudado a echar un cimiento sólido para el futuro. Vemos con optimismo el porvenir de nuestra cooperación. Estamos listos a garantizar la continuidad en los ámbitos tradicionales y avanzar en direcciones nuevas. Existen tanto la voluntad política como la base material para hacerlo. Los 130 años de las relaciones diplomáticas inspiran la certeza de que los objetivos planteados serán cumplidos y los lazos mutualmente ventajosos entre Rusia y México se fortalecerán por el bien de nuestros Estados y pueblos, en aras de la paz y estabilidad internacionales.
El artículo del Secretario de Relaciones Exteriores de los Estados Unidos Mexicanos, Marcelo Ebrard Casaubon, dedicado al 130° aniversario del establecimiento de relaciones diplomáticas entre México y Rusia
130° aniversario del establecimiento de relaciones diplomáticas entre México y la Federación de Rusia
Rusia es un país que genera gran interés en México. Existe un profundo aprecio por su cultura e historia, así como reconocimiento de sus grandes aportaciones a la ciencia, y de su peso en el sistema internacional.
México y Rusia celebramos este año el 130 aniversario del establecimiento de relaciones diplomáticas, las cuales se formalizaron el 11 de diciembre de 1890. Esta ocasión nos permite renovar nuestro compromiso de seguir fortaleciendo nuestros vínculos, con la convicción de que el trabajo conjunto aportará beneficios tangibles para ambas sociedades.
A lo largo de los años han tenido lugar notables interacciones entre personajes ilustres pintores, poetas, músicos, escritores, historiadores, luchadores sociales. Quizá el episodio más conocido sea el paso por México del cineasta Sergei Eisenstein a inicios de los años treinta. De esta diversidad de contactos han derivado vínculos de entendimiento y cooperación, así como un diálogo profundo y rico entre sociedades. Ha brindado fuerza, contenido y continuidad a las relaciones entre nuestros pueblos.
Este intercambio cultural que marcó los inicios de nuestra relación continúa contribuyendo notablemente a nuestra amistad. La exposición “¡Viva la vida! Frida Kahlo y Diego Rivera” fue muy exitosa ante el público ruso, habiéndose exhibido en 2018 y 2019 en la Sala Central de Exposiciones de Moscú “Manège” y en el Museo Fabergé de San Petersburgo. Igual fascinación generó en 2018 en el Museo del Palacio de Bellas Artes de la Ciudad de México la muestra “Pequeños Mundos” con más de 50 obras de Wassily Kandinsky, producto de la colaboración con la Galería Tretiakovskaya.
Entre las múltiples actividades conmemorativas en honor del 130 aniversario, realizaremos una exhibición conjunta de documentos históricos y fotografías sobre la riqueza de nuestra relación. El Gobierno de México trabaja además para ampliar su presencia en el vasto territorio de Rusia, habiendo celebrado el año pasado los “Días de México” en Samara y preparando una próxima edición en Novosibirsk.
Sobre la base de la simpatía entre las sociedades existe un diálogo fluido entre los gobiernos, el cual se ha enriquecido por la larga e ilustre tradición de las diplomacias mexicanas y rusas. Estamos convencidos de la importancia de la cooperación internacional y somos respetuosos de los principios de derecho internacional, entre ellos la igualdad jurídica de los Estados.
En observancia de esos principios, México y Rusia mantienen una relación bilateral estrecha. La visita a México del canciller Serguéi Lavrov en febrero de 2020 fue la más reciente confirmación del interés mutuo en mantener canales de interacción abiertos al más alto nivel. La pandemia de COVID-19 que comenzó poco después, puso de relieve el carácter estratégico y solidario de nuestra relación y nos recordó la importancia de sumar esfuerzos para generar consensos ante retos globales.
México y Rusia han mostrado su compromiso con el orden multilateral. Ambos trabajamos activamente en los foros internacionales en que coincidimos. Estamos convencidos de que son la mejor alternativa para acordar acciones coordinadas como el combate a la pobreza y a las desigualdades; contra el cambio climático, y para trabajar de manera conjunta en favor de la paz y la seguridad internacionales.
En la Organización de las Naciones Unidas, nuestra agenda es amplia y diversa. Valoramos que Rusia se sumara al consenso que dio lugar a la adopción por la Asamblea General de Naciones Unidas de la resolución 74/274, promovida por iniciativa de México, y copatrocinada por 179 países, en abril pasado, con el fin de garantizar el acceso global y equitativo a medicamentos, vacunas y equipos médicos. México participará como miembro no permanente del Consejo de Seguridad de la ONU en el bienio 2021-2022, y durante esa etapa nuestra interlocución será aún más importante.
En el G20 tenemos muy claras nuestras respectivas prioridades y ambos buscamos ser actores constructivos. Coincidimos también en otros importantes espacios, entre ellos la Organización Mundial de Comercio (OMC) y el Foro de Cooperación Económica Asia Pacífico (APEC). Existe asimismo la intención de generar espacios de diálogo comercial y colaboración entre esquemas regionales a que pertenecemos: la Alianza del Pacífico, en el caso de México, y la Unión Económica Euroasiática, en el caso de Rusia.
México y Rusia somos, respectivamente, la decimoquinta y décima primera economías mundiales. Trabajamos juntos para seguir incrementando los flujos comerciales y de inversión en ambos sentidos a partir de misiones empresariales. La reciente reactivación del Comité Empresarial Rusia-México de la Cámara de Industria y Comercio de Rusia, su membresía expandida y su ambicioso programa de trabajo dan cuenta del interés que existe en acercarse a México en el terreno económico. Asimismo, la Comisión Mixta de Cooperación Económica se reunirá el próximo año, parte de nuestros esfuerzos para lograr una recuperación incluyente y sustentable.
Nuestros países cuentan con un Convenio de Cooperación Técnica y Científica en vigor desde 1996, y trabajamos para fortalecer esta parte de la relación. Buscamos aprovechar el potencial existente en sectores como el aeroespacial y el de tecnologías de la información, donde hemos dado pasos iniciales y se han fortalecido los contactos, visitas y acuerdos entre diversas universidades e instituciones de ambos países. Buscamos también generar cooperación para la formación de especialistas médicos.
En materia turística, hasta antes de la pandemia del COVID-19, los intercambios entre nuestros países atravesaban uno de sus mejores momentos históricos en ambos sentidos. En 2018, con motivo de la exitosa Copa Mundial de Fútbol celebrada en Rusia, un total de 64,282 personas mexicanas visitaron Rusia, cifra récord. En 2019, 84,511 rusos visitaron México, un aumento de 175% en los últimos 3 años. Sin duda el COVID-19 ha tenido un fuerte impacto en este sector, pero confiamos en que el interés recíproco ayudará a retomar la dinámica positiva en cuanto las condiciones sanitarias lo permitan.
Por todo lo antes descrito, Rusia es y seguirá siendo un socio importante para México. Nuestra relación es sólida y las perspectivas son positivas. Seguiremos trabajando de manera conjunta para profundizar nuestros vínculos, ampliar nuestro diálogo y entendimiento, e intensificar nuestra colaboración en todos los ámbitos. Existen todas las condiciones para ello.
Discurso del Viceministro de Asuntos Exteriores de la Federación de Rusia Sergei Ryabkov en la inauguración de una exposición virtual de documentos de archivo con motivo del 130 aniversario del establecimiento de relaciones diplomáticas entre Rusia y México
Еl 11 de diciembre Rusia у México celebran el 130 aniversario del establecimiento de las relaciones diplomáticas.
La historia de la interacción entre nuestros países es mucho más profunda у se remonta a finales del siglo XVIII y principios del siglo XIX. Precisamente durante ese periodo comenzaron a establecerse los primeros contactos directos cuando surgieron pequeños asentamientos rusos en la parte Norte de América. México ya era bien conocido por los marineros, viajeros у científicos rusos. Para muchos de nuestros compatriotas el conocimiento del Nuevo Mundo comenzó con México, un país que tiene una rica historia, una cultura distintiva, costumbres у tradiciones únicas.
A pesar de miles de kilómetros que separan Rusia de México, nuestros pueblos siempre se han atraído entre sí. Literalmente, podemos decir que las obras de Diego Rivera у David Alfaro Siqueiros, el cine de Serguéi Eisenstein, la poesía de Vladimir Mayakovski y Iosif Brodski, la música de Juventino Rosas vinculan espiritualmente a Rusia у México. Los científicos rusos siempre han mostrado interés en los misterios de la historia mexicana, lo que se confirma con el descubrimiento científico de Yuri Knorozov, quien fue el primero en descifrar la escritura de los pueblos mayas. Ahora continuamos el enriquecimiento cultural mutuo entre nuestros países.
Es importante que desde el inicio las relaciones con México se basaron en los principios de la igualdad de Estados, el respeto a la soberanía, la no injerencia en los asuntos internos. En el año del 75 aniversario de la Victoria en la Segunda Guerra Mundial, debemos recordar que México nos apoyó durante los años de la lucha brutal contra el nazismo. Después trabajamos juntos con el fin de crear la ONU у construir la paz en la época de posguerra.
Hoy México es uno de los socios principales de Rusia en América Latina у el Caribe. Tradicionalmente nuestros países desarrollan una cooperación constructiva у adaptan sus mecanismos a las exigencias de la contemporaneidad sin depender de la coyuntura política.
El dialogo político entre Moscú у México se desarrolla a diversos niveles y se distingue por la apertura у confianza. Lo confirmó una vez más la visita del Ministro de Asuntos Exteriores de Rusia Serguéi Lavrov a México que se celebró este febrero. Los enfoques de nuestros países están en consonancia en muchos aspectos: nos une el deseo de formar un mundo multipolar, observar estrictamente el derecho internacional у fortalecer el papel central de la ONU. Estamos dispuestos para una estrecha colaboración у coordinación de nuestros enfoques, teniendo en cuenta la elección de México para el Consejo de Seguridad de la ONU, el Consejo de Derechos Humanos de la ONU, y ECOSOC. Esperamos continuar la cooperación activa en el marco del G20, APEC у otros foros intencionales.
México ocupa el segundo puesto entre los socios comerciales de Rusia en América Latina. Pero el potencial para el comercio у la inversión todavía queda por explorar. Observamos grandes posibilidades para la cooperación en el sector energético, la industria de construcción naval y automóvil, aeronáutica, química, farmacéutica, el transporte ferroviario, los sectores de agrícola, de alta tecnología у innovación.
Hemos logrado avanzar a través de los años у fortalecer la comunidad cultural у espiritual de nuestros pueblos. En las últimas décadas varias generaciones de mexicanos se han educado en las universidades de nuestro país у esta creciendo el interés por estudiar en Rusia. Compartimos una pasión por el futbol у los viajes.
Ahora, cuando la pandemia está creando nuevas líneas divisorias en el mundo, podemos señalar con toda seguridad que esto no ha afectado a nuestros países. Rusia у México están vinculados por relaciones probadas de confianza común, amistad у respeto. Formaremos una arquitectura de cooperación estrecha у fructífera teniendo en cuenta las realidades de hoy.
Con motivo del 130 aniversario de las relaciones diplomáticas, hoy abrimos una exposición virtual de materiales de archivo que resaltan los eventos más brillantes de la historia de las relaciones ruso-mexicanas.
¡Felicitamos a nuestros amigos mexicanos con esta fecha memorable!
Las palabras del Subsecretario de Relaciones Exteriores de México, Embajador Julián Ventura Valero, con motivo del 130 aniversario del establecimiento de relaciones diplomáticas entre México y Rusia
Amigas y amigos de México y Rusia:
Es un gusto dirigirme a ustedes con motivo del 130 Aniversario del establecimiento de relaciones diplomáticas entre nuestros dos países, formalizadas el 11 de diciembre de 1890.
Rusia es un país que despierta gran interés y aprecio en los mexicanos. Los contactos entre nuestras sociedades han marcado nuestra historia y cultura, desde el bien conocido paso por México del cineasta Serguéi Eisenstein, a inicios de los años treinta, hasta la muy exitosa exhibición de obras de Vasili Kandinski en el Palacio de Bellas Artes de la ciudad de México, hace un par de años.
Los dos países tenemos además una larga e ilustre tradición diplomática. Mantenemos una cercana comunicación tanto en el ámbito bilateral como multilateral. El diálogo franco y constructivo que mantenemos nos permite contribuir a la construcción de consensos globales, como estoy seguro será el caso durante los próximos dos años, cuando México ocupe un asiento no permanente en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas.
En el ámbito económico, damos pasos importantes, pero hay muchos espacios y potencial por aprovechar. Deseamos ampliar el comercio bilateral y los flujos de inversión. Me da mucho gusto confirmar que las empresas mexicanas que han incursionado en el mercado ruso, han encontrado oportunidades de crecimiento.
El turismo es otra área prioritaria para ambos. Los visitantes rusos son bienvenidos en México. Sé que pronto, cuando las condiciones sanitarias globales lo permitan, los reciberemos nuevamente en nuestras playas y ciudades históricas.
Estimados amigos, durante la pandemia del covid-19, ha sido más clara que nunca la importancia de la solidaridad, el diálogo y la cooperación. En este difícil momento ha sido evidente, una vez más, el aprecio, respeto mutuo y voluntad de cooperación entre México y Rusia. En este importante aniversario podemos afirmar con toda claridad que las relaciones entre nuestros países tienen sólidas bases. Con voluntad política de ambas partes estaremos generando cada vez mayores beneficios para nuestras sociedades.
¡Muchas felicidades y sigamos trabajando juntos!