la República Árabe Siria
Respuesta del vice director del Departamento de Información y Prensa del MAE de Rusia, Artiom Kozhin, a la pregunta de la televisión libanesa al-Mayadín sobre la decisión de la administración del presidente de EEUU, Donald Trump, de cancelar el programa de suministro de armamento a la oposición siria
Pregunta: ¿Cómo se precibió en Moscú la decisión de la administración del presidente estadounidense, Donald Trump, de cancelar el programa de suministro de armamento de la oposición siria? ¿Se podría decir que es uno de los resultados positivos de la reciente reunión de los presidentes de Rusia y EEUU, Vladímir Putin y Donald Trump, en Hamburgo? ¿Ha conllevado algunos resultados importantes en el ámbito de crisis siria?
Respuesta: A juzgar por todo, usted se refiere a la publicación hecha en el períodico The Washington Post el pasado 19 de julio. Los autores del artículo afirman que Donald Trump ordenó cancelar el programa secreto de la CIA de adiestrar y armar a la oposición “moderada” y que supuestamente esta decisión fue tomada en vista del deseo del presidente de EEUU de cooperar con Rusia en el ámbito de arreglo de la crisis siria.
No hemos oído de las fuentes oficiales sobre cualquier decisión tomada en Washington al respecto. No sabemos tampoco sobre el estado de programas similares que podrían realizarse por otros departamentos de EEUU. El servicio de inteligencia de EEUU no nos informa de esto. Además, el periódico destacó que la Casa Blanca lo había decidido con la CIA hace un mes, es decir, antes de la reunión en Hamburgo.
En general, hemos anunciado en reiteradas ocasiones nuestra postura en relación con los coqueteos de EEUU con los combatientes sirios. Esto puede conllevar las consecuencias militares y políticas imprevisibles. Hemos indicado en reiteradas ocasiones que a los estadounidenses que persiguen sus propios intereses geopolíticos no les importa con quién cooperar en Siria. Hemos aplicado esfuerzos para que Washington separe la llamada oposición moderada de los terroristas, incluida la rama local de Al Qaeda – Frente al Nusra – a la que el Pentágono no toca por una u otra razón al llevar a cabo sus operaciones.
No es algún secreto que una gran parte de los combatientes adiestrados por los estadounidenses en el marco del conocido programa “Train and Equip” (Adiestrar y Armar) se adhirieron al final al Estado Islámico y al Frente al Nusra. Es la repetición de la experiencia triste de Afganistán y Libia. Parece que las consecuencuas son evidentes a todos.
En lo que se refiere a las negociaciones en Hamburgo, el presidente ruso, Vladímir Putin, destacó que la discusión del tema sirio puso de relieve que Donald Trump entiende que nuestros Estados juntos pueden avanzar notablemente en el ámbito de arreglo del conflicto sirio. El resultado concreto de esta cooperación fue el acuerdo entre Rusia, EEUU y Jordania del pasado 7 de julio sobre una zona de distensión en el sur del país. Esperamos que esto eche los cimientos para progresar en otras vertientes también.