Émirats arabes unis
Discurso y respuestas a preguntas de los medios ofrecidos por el Ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, en la rueda de prensa conjunta celebrada al término de las negociaciones con el Ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación Internacional de los Emiratos Árabes Unidos, Jeque Abdallah bin Zayed al Nahyan, Moscú, 26 de junio de 2019
Estimadas damas y caballeros,
Hemos abordado en su totalidad las relaciones entre la Federación de Rusia y los Emiratos Árabes Unidos.
Hemos dado una alta apreciación al nivel actual de la interacción que destaca gracias a unos intensos contactos al nivel alto y más alto, así como al intercambio de delegaciones entre distintos ministerios y entidades. Hemos acordado continuar incentivando la interacción en plena correspondencia con la Declaración sobre la cooperación estratégica firmada en 2018 por los líderes de ambos países.
Hemos prestado mucha atención a las actividades económicas, comerciales y de inversiones que se desarrollan en el marco de las relaciones bilaterales. Hemos abordado proyectos conjuntos prometedores que son llevados a cabo en los más variados campos. Hemos subrayado la importancia de que se mantenga una dinámica positiva del intercambio comercial que sigue creciendo.
Ponemos muchas esperanzas en la reunión de la Comisión Interministerial ruso-emiratí para la cooperación económica, comercial y técnica, cuyos copresidentes son el Jeque Abdallah bin Zayed al Nahyan y el Ministro de Comercio e Industria de Rusia, Denís Mantúrov.
Hemos confirmado nuestra disposición a reforzar los vínculos entre las entidades federadas, por ejemplo, San Petersburgo y Abu-Dhabi. Nuestra intención es incentivar los contactos culturales y humanitarios, así como los intercambios turísticos, algo que es ya beneficiado por la introducción de un régimen libre de visados entre los dos países, en vigor a partir del pasado mes de febrero. En próximo septiembre el Jeque Sultan Al-Qasimi participará en la Feria del Libro de Moscú, una visita que será un relevante evento en el campo de los vínculos humanitarios.
En cuanto a los asuntos internacionales, hemos abordado en primer lugar los problemas que se van acumulando en Oriente Próximo y en el Norte de África, donde se mantienen amenazas terroristas y extremistas, así como derivadas del tráfico ilegal de armas. Dadas estas circunstancias, la coordinación en la esfera de la política exterior promovida por Rusia y los Emiratos Árabes Unidos se vuelve muy demandada.
Coincidimos en que sería de interés de todos los países de la región, sin excepción alguna, que los conflictos y las crisis fueran arreglados por la vía política en base al derecho internacional y con el debido respeto de los intereses de todos los países involucrados. Hemos abordado desde esta perspectiva la situación en Libia, Yemen y Siria, prestando especial atención al arreglo palestino-israelí que, a nuestro modo de ver, ha de mantenerse en el marco de las Resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU, de la Asamblea General de la ONU y de la Iniciativa de Paz Árabe.
Por supuesto, hemos abordado la situación en la zona del Golfo Pérsico. Estamos interesados en que las tensiones se relajen en dicha región de gran importancia estratégica para el mundo, para que sea promovida allí una agenda positiva y unificadora que propicie mediante el uso del diálogo la desaparición de cualquier discrepancia y contradicción. Hemos vuelto a llamar la atención a la Estrategia rusa de garantías de la seguridad colectiva de la que forman parte los Estados árabes del Golfo y la República Árabe de Irán y la que es apoyada por la comunidad internacional, incluida la Liga de los Estados Árabes, la Organización para la Cooperación Islámica y los miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU. Hemos notado interés en que el tema en cuestión se siga abordando. Contamos con que todos juntos podremos conseguir que las tensiones se relajen.
Nos mostramos bastante satisfechos con los resultados de las negociaciones. Hemos acordado mantener este estrecho contacto en una amplia gama de temas de mutuo interés, los puntos de referencia para los cuales son marcados por los líderes de ambos países en el marco de sus contactos permanentes. Me gustaría expresarle a mi colega mi agradecimiento por esta fructífera reunión.
Pregunta: Últimamente, la retórica de EEUU respecto a Irán se ha recrudecido notablemente. Por ejemplo, oímos al Presidente de EEUU, Donald Trump, decir que una 'fuerza abrumadora' puede emplearse contra Teherán. Tales declaraciones suenan a veces como amenazas directas. Al mismo tiempo, la República Islámica de Irán declara que las sanciones estadounidenses cerraron la 'ventana de posibilidades' de arreglar el conflicto por vía diplomática. ¿Queda hoy la posibilidad de arreglar la crisis mediante las negociaciones, según usted? Si es así, ¿qué debería emprender cada una de las partes?
Respuesta: Daré una respuesta simple a la pregunta si se puede arreglar la crisis mediante las negociaciones: las negociaciones son posibles siempre y cuando las partes estén dispuestas a sostenerlas manifestando el respeto mutuo, a tenor de los principios del Derecho Internacional, la práctica diplomática y decencia. Cuando tales declaraciones como 'en cuanto nos sentamos a la mesa de las negociaciones empezará la era de prosperidad en Irán' alternan con insultos directos y sanciones humillantes que se promueven, en particular, en los últimos dos días, no creo que de este suelo puedan emerger algunos brotes. La parte iraní ya declaró que en esta coyuntura no se puede hablar de cualesquiera negociaciones. Además, nuestros colegas estadounidenses exhortan a Irán a iniciar las negociaciones sin condiciones previas, mientras que las sanciones unilaterales arbitrarias impuestas por EEUU afectan ya un 80% del intercambio comercial iraní y estas sanciones tienen el carácter extraterritorial con el fin de obligar a todos a obedecer a la voluntad de Washington. ¿De qué condiciones previas se puede hablar si EEUU ya impuso a Irán tantas condiciones previas que todos entienden que no se cifra las esperanzas a las negociaciones sino a que Irán se rinda y acepte todas las exigencias que plantea EEUU desestimando las normas del Derecho Internacional?
No existen puntos sin retorno, aunque creo que muchos quisieran crearlos. Trataremos de persuadir a nuestros colegas iraníes y estadounidenses de que es necesario apartarse de esta línea peligrosa, empezar a regular las contradicciones mediante un diálogo civilizado que prevé poner fin a la política de ultimátums, sanciones y chantaje.
Junto con mi colega y amigo, hemos mencionado hoy que hemos abordado la situación en el Golfo Pérsico. Me parece que la idea que promovemos sobre el diálogo entre los Estados árabes del Golfo Pérsico e Irán es una alternativa al rumbo nefasto al que empujan la región los belicistas. El diálogo siempre ayuda a resolver las contradicciones por vía pacífica. Al menos, lo hace posible. Me parece que los Estados árabes del Golfo Pérsico podrían apoyar de una u otra manera el diálogo en vez de empujar a la región a la línea fuera de la que ya es posible el uso de la fuerza. Esto ejercerá un efecto funesto en Oriente Próximo, el Norte de África y muchas regiones vecinas, conllevará a una crisis internacional.
Pregunta: ¿Contribuyó la reunión de los jefes de Consejos de Seguridad de Rusia y EEUU a reducir la tensión en las relaciones entre los países? ¿Se logró alcanzar un progreso en el ámbito de arreglo sirio y preparación de la cumbre de los Presidentes de Rusia y EEUU en Osaka?
Respuesta: Siempre es útil una conversación cara a cara. Está claro que una conversación en ningún formato no puede resolver todos los problemas. Mientras, me parece que en EEUU crece el entendimiento de lo inútil e ineficaz de las exigencias dirigidas a Rusia a cambiar nuestra política independiente, obedecer a las posturas promovidas unilateralmente por EEUU en la arena internacional en violación del Derecho Internacional. Un ejemplo es su conducta en relación con el Plan de Acción Integral Conjunto (PAIC) para el arreglo de la situación en torno al programa nuclear iraní. EEUU no sólo abandonó el PAIC sino, de hecho, prohíbe a todos los demás a cumplir la resolución del Consejo de Seguridad de la ONU que aprobó este programa. Una parte de este programa – el Plan de Acción aprobado por el Consejo de Seguridad de la ONU – prevé desbloquear los vínculos económicos de Irán con el mundo externo. Es una parte de la resolución del órgano supremo de la Organización de Naciones Unidas. Ahora EEUU prohíbe a todos los países a cumplir esta resolución.
En cuanto a la pregunta si se logró reducir la tensión, no la provocamos. Esto no depende de nosotros. Espero que las masas políticas estadounidenses lleguen a entender que los intentos de hablar con nosotros en el idioma de sanciones son vanos.
Estamos dispuestos a hablar sobre los temas que representan el interés mutuo y si el diálogo puede sostenerse de forma equitativa y con respeto mutuo, lo que pasa en nuestros contactos con los colegas estadounidenses en relación con la situación en Siria, en particular. Existe un canal de comunicación entre los militares, las llamadas zonas de distensión para reducir la tensión, intercambiar valoraciones sustanciales de la situación. Estamos de acuerdo (al menos, los estadounidenses lo confirman en palabras) con que Siria debe quedarse como un Estado territorialmente integro, todos deben respetar su soberanía, independencia. Es el objetivo principal. El Secretario del Consejo de Seguridad de Rusia, Nikolái Pátrushev, lo declaró ayer al término de las negociaciones en Jerusalén.
Naturalmente, vemos de forma diferente el camino hacia este objetivo. Nos pronunciamos por entablar lo más pronto posible el diálogo inclusivo, por el establecimiento del control del Gobierno sirio sobre las zonas que están todavía bajo el control de los grupos terroristas, de plena conformidad con la resolución 2254 del Consejo de Seguridad de la ONU.
Los estadounidenses intentan conservar su presencia y la presencia de los grupos extremistas que están bajo su control en varias zonas al este del río Éufrates. Esto no contribuye al cumplimiento de los acuerdos mencionados.
Sea lo que sea, la conversación con la participación de los Secretarios de Consejos de Seguridad de Rusia y EEUU, su homólogo israelí a que se adhirió también el Primer Ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, fue útil, porque espero que nuestros socios hayan entendido que no apoyaremos los intentos de pasar toda la discusión sobre Siria en la dirección antiiraní. Es una postura inoportuna respecto al quid del problema que consiste en la necesidad de entablar el diálogo inclusivo entre los sirios, a tenor de la resolución que he mencionado con una postura irreconciliable en relación con los restos de grupos terroristas y con un respeto incondicional de la soberanía y la integridad territorial de la República Árabe de Siria.
En cuanto a la reunión de los Presidentes de Rusia y EEUU, no existe alguna agenda acordada. Hemos oído los temas mencionados por los representantes de la Casa Blanca y el Departamento de Estado de EEUU. Son temas evidentes para todos. Creo que los propios Presidentes determinarán qué temas son prioritarios para ellos y los abordarán directamente. Es siempre útil. Al término de este contacto, dispondremos de más información que podremos compartir con Ustedes.