le Royaume du Maroc
Entrevista concedida por el Ministro de Asuntos Exteriores de la Federación de Rusia, Serguéi Lavrov, para el canal de televisión de Egipto TeN TV, Moscú, 14 de diciembre de 2021
Pregunta: ¿Cómo estima usted las relaciones ruso-árabes? ¿En qué consiste la diferencia entre su estado actual y la situación en los tiempos de la Unión Soviética?
Respuesta: El estado actual se caracteriza con que Rusia tiene relaciones basadas en el respeto mutuo que se desarrollan progresivamente con todos los Estados árabes sin excepción. En la época de la URSS, no mantuvimos las relaciones diplomáticas con todos, a pesar de que la Rusia Soviética fue el primer Estado que reconoció a Arabia Saudí. Ahora se han superado todo lo superfluo del pasado y los prejuicios ideológicos. Tenemos estrechos vínculos económicos, está desarrollándose rápidamente nuestra cooperación inversionista, lazos humanitarios, educativos. Quisiera mencionar contactos de los musulmanes rusos que aprovechan regularmente la hospitalidad de Arabia Saudí adonde viajan para participar en la peregrinación a La Meca. Interaccionamos estrechamente en la arena internacional.
Quisiera destacar especialmente que existen las oportunidades de estudiar medidas adicionales a emprender para desarrollar la cooperación en el ámbito de inversión. El Fondo Ruso de Inversión Directa fundada por iniciativa del Presidente de Rusia,Vladímir Putin, actúa ya durante varios años. Este organismo estableció plataformas conjuntas con varios países árabes (ante todo, los países del Golfo) y realiza proyectos a gran escala en el sector energético, la exploración del espacio ultraterrestre y otras áreas de alta tecnología. Próximamente, en Egipto comenzará la construcción de la primera en África central nuclear El Dabaa con el uso de la tecnología rusa. Los Emiratos Árabes Unidos incrementan sus vínculos económicos e inversionistas con la Federación de Rusia. El intercambio comercial crece a ritmo récord. Arabia Saudí, Argelia son nuestros socios principales en el mundo árabe y el norte de África.
Pregunta: Esta entrevista coincide con los eventos que se llevan a cabo en el marco del Año Dual de Cooperación Humanitaria de Rusia y Egipto declarado en la reunión del Presidente de Rusia, Vladímir Putin, y el Presidente de Egipto, Abdel Fattah el Sisi, en Sochi en 2018. ¿Qué une a El Cairo y Moscú, en vista de los cambios actuales en el mundo?
Respuesta: Realmente, la celebración del Año Dual de Cooperación Humanitaria de Rusia y Egipto se acordó por los Presidentes de Rusia y Egipto hace más de dos años. Fue programada para 2020, pero, debido a la pandemia, se decidió celebrarlo durante el año en curso. Su inauguración oficial tuvo lugar en El Cairo en junio pasado. Está previsto llevar a cabo más de 100 eventos de diversa índole en el territorio de los dos países en el ámbito de cultura, ciencia, educación, deporte, turismo y otros contactos humanitarios. Una mitad del Gobierno ruso – Ministerios que se ocupan de estas direcciones de cooperación están involucrados de una u otra manera en la celebración de estos eventos. Varios eventos ya se han celebrado y centran mucha atención de los ciudadanos de Rusia y Egipto.
Nuestros países mantienen desde hace mucho buenas relaciones que se establecieron ya en los años cuando Oriente Próximo y el Norte de África defendían su independencia, su derecho a elegir el propio camino de desarrollo. Estas relaciones pasaron por períodos diversos y ahora salieron a un nivel sin precedente en la historia.
Pregunta: Usted ha destacado un desarrollo rápido de las relaciones económicas y la cooperación en materia de construcción de la central nuclear El Dabaa, así como la creación de la zona industrial rusa en la zona económica del canal de Suez. Se observa que muchos turistas rusos regresan a Hurghada, Sharm el Sheikh y otros balnearios. ¿Se hizo la cooperación económica y comercial la locomotora principal en las relaciones ruso-egipcias?
Respuesta: Sí, a través de proyectos a gran escala. Usted ha mencionado la zona industrial rusa.Tiene enormes capacidades. Solo se lanza, y ya ha formado una “cola”de las empresas rusas que deseen participar en ésta, crear su industria. Esto no solo es de suma importancia para el mercado egipcio. Este proyecto fue lanzado para cubrir toda la región. Creo que no solo contribuirá al desarrollo de la asociación bilateral de Rusia y Egipto, sino también dará un impulso importante al crecimiento económico de la propia República.
Pregunta: Los países del mundo árabe están preocupados por varios problemas y crisis. Quisiéramos informarles de la postura de Rusia al respecto. Comencemos de Libia. ¿Sigue usted los preparativos para las elecciones presidenciales en este país y qué es su objetivo?
Respuesta: Rusia contribuye, durante muchos años, a los esfuerzos internacionales dirigidos a arreglar el crisis en Libia. A partir de que en diciembre de 2015 se aprobaron los Acuerdos de Sjirat, nuestro país participa en varios formatos internacionales, incluidas las conferencias en París, Palermo, Berlín. En el curso de estos eventos, se formaron los principios generales que no se logró realizar.
En noviembre de 2020, gracias a los esfuerzos de los coordinadores de la ONU, las partes libias pudieron llegar a un acuerdo sobre el restablecimiento de su Estado mediante la creación de los mecanismos de preparación para las elecciones. Se establecieron organismos de transición. El jefe del Gobierno de transición, Abdul Hamid Dbeibah, visitó a Rusia. En la etapa anterior, Rusia fue anfitriona de una reunión de los bandos libios en que participaron también nuestros amigos de Egipto. Ayudaron a nosotros y a Turquía a hacer sentarse a una mesa de negociaciones a los representantes de Occidente y del Este de Libia.
Todos estos esfuerzos a que contribuyó también la Federación de Rusia permitieron lanzar el proceso generalmente reconocido que prevé la celebración de las elecciones presidenciales y parlamentarias generales. Se fijó la fecha: 24 de diciembre. Espero que no cambie. La tarea prioritaria para nosotros no consiste en la observancia formal de un plazo, sino la preparación sustancial de las elecciones de forma que puedan contar con la participación de los representantes de todas las principales fuerzas políticas y sus resultados sean reconocidos por todos. Diré franca y abiertamente que, desde este punto de vista, no veo una tragedia hasta si se postergan un poco los plazos de su celebración. Lo más importante es que todos los problemas que se manifiestan ahora en el proceso de preparación de las elecciones sean resueltos. Me refiero a la inclusividad de los participantes de este proceso y la lista de candidatos. Hubo intentos de varios órganos electorales de Libia de no dar acceso a unos candidatos a estas elecciones. Espero que todos puedan participar.
Pregunta: ¿Mantiene Usted una postura definida con respecto a un candidato? La candidatura de Saif al Islam Gadafi, hijo del difunto líder libio Muamar Gadafi, evidentemente no le conviene a EEUU.
Respuesta: No puedo responder por el pueblo libio. Y menos aún, tiene derecho a hacerlo EEUU que participó en la destrucción del Estado libio en 2011. Según dijera el entonces Presidente Barack Obama, EEUU trató de liderar “desde atrás”, dejando desempeñar el papel protagónico a países como Francia. Según se revela, Paris quería ajustar las cuentas personales con Muamar Gadafi. No me tomaría la libertad de dar consejos a otro pueblo, pero recomiendo encarecidamente a los estadounidenses y europeos no tratar de determinar la suerte de otro pueblo, y menos aún, del libio. Que lo decidan los propios libios.
Sabemos que Saif al Islam Gadafi y, en general, clan Gadafi, tienen muchos partidarios, igual como los tienen el mariscal Jalifa Hafter, Aguilah Salah, Abdul Dbeibé y otros participantes de la carrera presidencial. Nos pronunciamos porque los propios libios garanticen la transparencia y la pureza de los procesos electorales y tengan el valor de reconocer la opción hecha por su pueblo.
Pregunta: ¿Entiendo correctamente que Usted considera a Occidente responsable de la destrucción de Libia en 2011 y de los sufrimientos que soportaron los libios durante los últimos 10 años?
Respuesta: Este hecho es imposible negar. Más aun, todos reconocen una realidad distinta, mucho más grave: después de que Occidente desarticulara el régimen institucional en Libia, en este espacio apareció un “agujero negro”, a través del cual los bandidos y extremistas armados por Occidente para derrocar a Muamar Gadafi, se dirigieron al sur. Fue la causa principal de la crisis que durante muchos años azota a Sahara-Sahel. Ahora es una de las zonas más peligrosas desde el punto de vista de la propagación de la ideología extremista y la presencia física de diversas filiales de Al Qaeda y el Estado Islámico. Hacia el norte, a través de Libia se precipitaron los flujos de refugiados de los que Europa sufre y procura deslindarse. Se debe responder por sus actos.
Pregunta: La amenaza del terrorismo constituye un serio desafío para los países de Sahara-Sahel. ¿Rusia aplica esfuerzos para prestar ayuda a estos países?
Respuesta: El pasado 11 de noviembre, sostuve negociaciones con el Ministro de Relaciones Exteriores de Malí Abdoulaye Diop; el pasado 7 de diciembre, con el Ministro de Relaciones Exteriores de República de Chad, Mahamat Zene Cherif. Estamos en estrecho contacto con los dirigentes de la RCA. Todos ellos aspiran a movilizar las fuerzas a la lucha contra el terrorismo. En estos países, en uno u otro grado, están presentes las filiales de Al Qaeda, el Estado Islámico o Boko Haram. Todo esto ya se traslada a la costa del golfo de Guinea, en torno al lago Chad se están concentrando grupos de bandidos que cometen incursiones en las aldeas vecinas, aterrorizan a los habitantes locales, explotan extremadamente los recursos naturales de los países africanos. Es muy difícil hacerles frente.
Prestamos asistencia a los cinco países de Sahara-Sahel que ahora está constituyendo las fuerzas conjuntas. Suministramos a los países de la región armamentos que incrementan su capacidad para erradicar la amenaza terrorista. Los militares de estos países con regularidad pasan adiestramiento en los centros de instrucción del Ministerio de Defensa de la Federación de Rusia, adiestramos asimismo a los efectivos de los contingentes de paz y agentes de las fuerzas del orden público. Actualmente, el CS de la ONU estudia la posibilidad de participar en el apoyo económico de las fuerzas conjuntas de los cinco países de Sahara-Sahel. Los hechos evidencian que nuestros colegas occidentales no muestran gran entusiasmo al respecto. Rusia está dispuesta a dar un paso concreto para que la ONU asuma a nivel de conciencia la necesidad de prestar un apoyo más enérgico y sustancial a la labor de los cinco países arriba mencionados en esta área.
Pregunta: El mando de las FF.AA. de EEUU no deja de avisar en sus declaraciones de que es inadmisible cualquier presencia militar rusa en los países africanos. ¿Qué opina acerca de tales declaraciones?
Respuesta: Esta mundividencia imperial y falta absoluta de respeto por otros países es propia de Estados Unidos y de su modus operandi en el mundo no solo con respecto a Rusia, China y otros Estados que son calificados por Washington como sus rivales o enemigos, sino con respecto a los países considerados sus aliados. ¿De qué manera fue solucionado el problema de la venta a Australia de submarinos atómicos? Se tomó la decisión y se puso en práctica.
En cuanto a sus aspiraciones de gestionar a solas continentes enteros, creo que los países de la región, sea África u Oriente Próximo, representan unas estructuras estatales lo suficientemente maduras y con extensas experiencias históricas como para darse cuenta de que estas declaraciones carecen de sentido.
Los militares estadounidenses no son los únicos en manifestar que es inadmisible la presencia militar rusa y china en África. Así, por ejemplo, Mike Pompeo, en su momento, mi homólogo estadounidense, es decir, Secretario de Estado de EEUU, realizando una gira por varios países del continente africano poco antes del final del mandato de la Administración de Donald Trump, por todas partes llamó en público a no comerciar con Rusia ni con China, porque ambos países supuestamente estaban comerciando con dichos países para “colonizar a todos”. Todo parece indicar que los estadounidenses se comportan de la manera de la que se comportan únicamente para reforzar la democracia. Por supuesto que todos se percatan de que tales declaraciones son ridículos y carentes de sentido.
Este sentimiento de supremacía por encima de los demás no solo les es propia a los estadounidenses, sino también a nuestros interlocutores europeos. Francia nunca desaprovecha la ocasión de señalar que Rusia “no se atreverá” a prestar asistencia en forma de ayuda militar a Mali. Y eso que los líderes malienses lo ha explicado todo en detalle. El Primer ministro del país en cuestión habló desde la tribuna de la Asamblea General de la ONU, expresando su preocupación ante la decisión de Francia de reducir su presencia en el marco de la operación Barkhane a pesar de la creciente amenaza terrorista. Así, en el norte del país, donde la situación es especialmente grave, ya se habían cerrado dos bases, mientras que una más habrá de cerrarse en lo que queda del año. Por supuesto, en esta situación las autoridades malienses se ven obligadas a buscar formas de compensar este paso de Francia. Hace poco, junto con el Ministro de Defensa de Rusia, Serguéi Shoigu, mantuvimos en París una conversación con nuestros homólogos franceses en formato 2+2. Los llamamos a dejar al lado la política de doble rasero en la lucha contra el terrorismo. Si todos nosotros queremos ayudar a África, hemos de hacerlo, mancomunando nuestros esfuerzos, y no “cercando” cada uno su zona de responsabilidad ni “marcando” el pertinente territorio, para impedirle el paso al resto del mundo. Es una forma de pensar propia del siglo XIX, ni siquiera del siglo XX.
Pregunta: Mantiene buenas relaciones con Marruecos y Argelia. ¿De qué manera propicia ello la solución de la crisis en el Sahara Occidental?
Respuesta: La crisis en el Sahara Occidental, al igual que cualquier otra crisis, debe solucionarse en base al cumplimiento de las pertinentes Resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU, sea el caso del Sahara Occidental, del arreglo palestino-israelí o del arreglo sirio. En todos los campos existen Resoluciones aprobadas por consenso que sientan las bases internacionales legales para la solución de tal o cual problema. En caso del Sahara Occidental, las Resoluciones prevén un diálogo directo entre Marruecos y el Frente Polisario. Debe ser reanudado cuanto antes. Las negociaciones en cuestión deben ser iniciadas, propiciando la elaboración de las fórmulas de compromiso que correspondan con los intereses de ambas partes. La inestabilidad en el África del Norte y en la zona del Sahara y el Sahel afecta a la situación general e impide progresar en el arreglo en el Sahara Occidental. La perspectiva no es nada optimista. Consideramos que, dada la situación en la región del Sahara y el Sahel, las partes enfrentadas en el conflicto, es decir, Marruecos y el Frente Polisario deben aplicar un esfuerzo aún más activo, para que se vislumbren algunas perspectivas.
Si dejamos la situación tal como es ahora, los terroristas pueden intentar aprovechar la situación desesperada que vive la población de la zona, para intentar atravesarla con sus “tentáculos”. Sabemos que diferentes grupos extremistas, como por ejemplo, Al-Qaeda, el Magreb islámico, el Estado Islámico, se están plateando tal posibilidad y sus planes son bastante ambiciosos. Estamos bastante preocupados, puesto que no solo fallan en reanudarse las negociaciones directas Marruecos y el Frente Polisario, sino que en noviembre del año pasado ambas partes abandonaron el régimen del cese de las hostilidades que se había respetado durante casi 30 años.
Es evidente que hay una escalada de tensiones en esta parte de África. Estamos convencidos de la necesidad de que todos los países con influencia llamen a las partes enfrentadas a mostrarse comedidas e insisten en los métodos políticos y diplomáticos del arreglo de la situación. En estas circunstancias nos pronunciamos en contra de cualquier paso unilateral, es aplicable también al arreglo palestino-israelí. En cualquier conflicto los pasos unilaterales no previstos por los acuerdos básicos afectan negativamente al proceso del arreglo, generando riesgos innecesarios. Hace un año EEUU reconoció la soberanía de Marruecos sobre todo el Sahara Occidental. Ello no ayuda a la causa y entra en directa contradicción con los principios universales del arreglo en la región que rezan que el estatus definitivo del territorio en cuestión puede ser determinado únicamente vía referéndum. Esperamos que no se vuelvan a dar unos pasos tan bruscos y que todos aprovechen sus recursos para instar a las partes a sentarse a la mesa de las negociaciones y no a apoyar a un bando concreto.
Pregunta: En pasado octubre el Primer ministro de Israel visitó Moscú, tras lo cual acudió a la capital rusa el líder palestino. ¿Es ello muestra de que Rusia busca encontrar una nueva solución para el problema?
Respuesta: No puede haber nuevas soluciones al respecto, a excepción de la reanudación de las negociaciones directas basadas en el Derecho Internacional y en los documentos aprobados por la Asamblea General y por el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas que nadie pone en tela de juicio: se trata de una solución de dos Estados, debiendo quedar acordados todos los aspectos del estatus definitivo.
No podemos apoyar los pasos unilaterales. Sobre todo, me estoy refiriendo a la continuada actividad de ampliación de asentamientos llevada a cabo por Israel. Nadie lo aprueba, representantes de la ONU, de la UE, de EEUU y de Rusia condenaron esta práctica. Y es precisamente el “cuarteto” de mediadores internacionales que podría poner más empeño en que las partes renueven las negociaciones directas. Rusia está interesada en ello. Se toman medidas unilaterales, en forma de intentos de cambiar el estatus histórico de la mezquita Al-Aqsa, de la expropiación forzosa de los terrenos y de las casas palestinas que son incluso tiradas abajo. Es necesario renunciar urgentemente a este modo de actuar. Insistimos en que sea convocado el “cuarteto” que se ha reunido ya a nivel de expertos. Estamos convencidos de que la seriedad de la situación impone la necesidad de una reunión a nivel ministerial. Estamos en contacto con nuestros interlocutores. De momento Washington prefiere aplicar otros métodos y no plantear el tema en cuestión a nivel ministerial, aunque continúa con su diplomacia bilateral con los palestinos y los israelíes. Si garantizaran el éxito, todo el mundo estaría de lo más contento. Lo que percibimos de momento, es que el esfuerzo colectivo está muy solicitado y que es insuficiente.
Pregunta: Recientemente, Usted se ha reunido con el líder del movimiento reformista de FATH, Mohammed Dahlan, y con Mahmud Abás en Moscú. ¿Forma parte de los esfuerzos de Rusia para lograr la reconciliación palestina?
Respuesta: Mahmud Abás es el Presidente de Palestina, Mohammed Dahlan es una figura política destacada. Pero no se trata solo de ellos. Es necesario restaurar la unidad palestina con la participación de todos los grupos locales sin excepción. Y son entre 12 y 13. Nosotros invitábamos a todos ellos a Rusia varias veces. Aceptaban nuestra invitación. Cada vez ellos intentaban llegar a una postura común, pero no lo conseguían del todo.
Estoy convencido de que el restablecimiento de la unidad palestina es de importancia fundamental por al menos dos razones. Primero, si hablamos de la esencia de un arreglo palestino-israelí, los palestinos, al restaurar la unidad de sus propias filas, reforzarán sus posiciones en las negociaciones. Desacreditarán las declaraciones que a veces se escuchan de algunos políticos en Israel: “¿Con quién hablar allí? Si no representan a nadie allí. Lo tienen todo arruinado: Ramala, Gaza, etc." Es fácil alegar estos "pretextos", que sirven para "evitar" las negociaciones.
En segundo lugar, la restauración de la unidad palestina depende únicamente de los palestinos. Aquí, ni Israel, ni ningún otro socio occidental, ni nadie más pueden impedir un acuerdo. Hay una pregunta sobre la postura de los países árabes, que apoyan a los palestinos. A veces lo hacen de maneras diferentes. Las contradicciones dentro del mundo árabe, yo también las dejaría de lado. El pueblo palestino ya ha sufrido tanto, que es imposible continuar en la misma situación, que en realidad impide “sobre el terreno” la creación de un Estado palestino viable. Por supuesto, esto debe hacerse en beneficio de todos los Estados árabes. Apoyamos activamente las aspiraciones de Egipto, que está ayudando a restablecer esa unidad. Queremos que otros países árabes también se sumen a estos esfuerzos.
Pregunta: El mundo árabe ya ha experimentado las dificultades de la “guerra fría”. Quiero preguntarle: ¿ha vuelto la “guerra fría”?
Respuesta: Ésta es una pregunta que puede responderse eternamente. Prefiero una respuesta corta. Por supuesto, ésta no es aquella "guerra fría" que conocimos. "La anterior" se desarrollaba en un orden mundial estable, aunque negativamente estable, cuando no dos potencias, sino dos sistemas socioeconómicos – el capitalismo y el socialismo – se oponían. Cada una de ellas controlaba vastos territorios. En sentido figurado, “la mitad” del mundo, si tenemos en cuenta la influencia que tuvo la Unión Soviética en el proceso de descolonización, incluso en África. Ahora la situación es diferente, hay muchos más jugadores.
El nuevo Canciller alemán, Olaf Scholz, hablando con motivo de la composición del gobierno, dijo que en este mundo no van a ser solo dos Estados que determinarán todo, sino varias potencias importantes. En esencia, es el reconocimiento del multilateralismo, que también tiene dos caras. Una es lo que muchos críticos del orden mundial policéntrico utilizan ahora en sus argumentos: el multilateralismo equivale al caos. Todos jugarán por ellos mismos. Cada vez hay jugadores más grandes. Ellos se sentirán apretados, y el mundo se volverá más caótico.
Nuestra postura consiste en que el multilateralismo es una realidad objetiva. Y el "ascenso" de China, como la principal economía del mundo, está a la vuelta de la esquina. India está en auge. La región Asia-Pacífico se está convirtiendo en una locomotora del desarrollo, reemplazando a la región euroatlántica en esta facultad. América Latina quiere definir su identidad. Así lo apuntan recientes iniciativas del presidente mexicano. En África crece la autoconciencia, el deseo de "matizar" más su identidad en los contactos con el mundo exterior, interesado en los innumerables recursos naturales del continente africano. La tarea no es de "azuzar" a los países entre sí en este entorno altamente competitivo, sino tratar de ordenar de alguna manera este "movimiento browniano". Este es exactamente el objetivo de la iniciativa del Presidente ruso, Vladímir Putin, de convocar una cumbre de miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU. Y no porque ellos deban decidir por todos, sino porque, según la Carta de la Organización, se les confiere una responsabilidad especial de mantener la paz y la seguridad internacionales. Al reunirse, los líderes de los cinco países podrían desarrollar recomendaciones para el resto de la comunidad mundial, que, creo, se acogerían de manera positiva. Es necesario traducir el estado de confrontación negativa en un diálogo. Y nosotros lo estamos desarrollando conjuntamente con los estadounidenses. El pasado 7 de diciembre el Presidente Vladímir Putin habló con el Presidente de Estados Unidos, Joe Biden, durante más de dos horas por videoconferencia. Con todas las graves contradicciones y diferencias en los enfoques, existe el deseo de desarrollar ese diálogo, al menos en Estados Unidos. Espero que tal estado de ánimo aparezca y en otros miembros occidentales de los “cinco”. Nuestro socio estratégico, la República Popular China, ha reafirmado su disposición e interés en la celebración de dicha cumbre.
Pregunta: Usted está defendiendo los intereses de su país en el ámbito internacional durante casi 17 años. ¿Cuáles fueron los años más difíciles para usted?
Respuesta: Ésta es una pregunta abstracta. No pienso en esto, porque si pienso sobre lo difícil que fue para mí, se complicaría más mi trabajo. Necesitamos trabajar hoy, y mirar hacia adelante, no hacia atrás.