Comentario ofrecido por la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia, María Zajárova, en relación con la disposición de Rusia para seguir suministrando productos militares rusos a los países socios, así como garantizar su mantenimiento técnico y reparaciones continuos, a pesar de la presión de las sanciones por parte de EEUU y sus aliados
Actualmente, destacamos la creciente actividad de los emisarios del Gobierno estadounidense que actúan incluso a través de las embajadas de EEUU en países extranjeros y ejercen una manifiesta presión sobre los dirigentes militares y políticos de los países, cuyas fuerzas de seguridad disponen de aeronaves (aviones y helicópteros), producidas en Rusia (la Unión Soviética), buscando terminar su uso y trasladarlas posteriormente al régimen kievita a través de los intermediarios que respaldan Occidente.
Entretanto, en forma del argumento principal, promueven malintencionadamente las insinuaciones sobre la incapacidad de la Federación de Rusia de facilitar en las condiciones actuales su mantenimiento técnico de alta calidad y suministrar piezas de repuesto originales, necesarias para reparaciones.
Con plena responsabilidad declaramos que Rusia implementará rigurosamente todos los compromisos correspondientes con sus socios de los proyectos en curso y los futuros.
Además, quisiéramos hacer hincapié en el hecho siguiente. En efecto, había raros casos cuando se retrasaron suministros de productos especiales rusos. Tal situación constituye una consecuencia de las amenazas de sanciones sin precedentes de Occidente colectivo a los transportistas internacionales que cooperan con nuestro país.
Es evidente otro hecho indiscutible de la competición poco concienzuda por parte de EEUU y sus aliados. Desplazando a vehículos rusos de los mercados extranjeros, los estadounidenses simultáneamente imponen sus modelos a nuestros socios, protegiendo de esa manera, en primer lugar, los intereses de su propio sector militar e industrial.