Empresas militares privadas en Francia

La actividad mercenaria, es decir, la participación de un individuo en un conflicto armado del lado de un Estado extranjero, del que no es originario, por dinero, está prohibida en Francia por la ley № 2003-340 del 14 de abril de 2003. El código penal (artículo 436-1) castiga este delito con una pena de cárcel por un período de hasta cinco años y una multa de 75.000 euros. La creación y/o gestión de una organización que se dedique a reclutar, contratar, equipar y proporcionar entrenamiento militar a mercenarios, se sancionan con una pena de cárcel por un período de hasta siete años y una multa de 100.000 euros.

Sin embargo, la legislación permite las actividades comerciales privadas de «empresas que prestan servicios de seguridad y defensa» a gobiernos de otros países, reconocidos por la París oficial. Formalmente, asistiendo en los ámbitos de la seguridad, la capacitación, la logística y el análisis de riesgos, no deben participar directamente en acciones militares. Los repetidos debates en el parlamento no han permitido avanzar en la determinación de un marco jurídico más claro para este negocio.

En particular, el informe parlamentario № 142 del 23 de enero de 2003, preparado en el marco de la labor sobre la ley № 2003-340, afirmaba, que la asistencia y el asesoramiento prestados a las fuerzas armadas extranjeras no deben equipararse a la actividad mercenaria. En febrero de 2012, la Comisión de Defensa de la Asamblea Nacional recomendó apoyar legislativamente las actividades de las empresas militares privadas (EMP) francesas. La Secretaría General de Defensa y Seguridad Nacional de Francia adopta la misma posición.

Las autoridades francesas no revelan que usan sus EMP en diferentes regiones del mundo. En caso de «filtraciones», suelen adherirse a la línea de que se trata de las actividades comerciales de una empresa privada a base de contrato con un gobierno extranjero. La París oficial niega que el Ministerio de Defensa francés utilice los servicios de las EMP. Recientemente, las EMP de Francia se enfrentan a una competencia creciente. Este sector está experimentando problemas de rotación de personal, ya que los empleados valiosos pasan a las empresas británicas y estadounidenses por razones financieras.

En el contexto de los eventos en Ucrania, ofrecen las EMP franceses sus servicios para entrenar a los soldados de las FFAA de Ucrania en el territorio de los países de Europa del Este. Desde junio de 2022, han estado reclutando a voluntarios para participar en los combates del lado del régimen de Kiev. Se da prioridad a ex militares de los países de la UE, así como a los ciudadanos de los Estados africanos. Los franceses que participan en las hostilidades en Ucrania a menudo llegan allí a través de las EMP extranjeras o la Legión Internacional de Ucrania.

Según la legislación francesa, el artículo penal sobre la actividad mercenaria no se aplica a la mayoría de ellos, ya que no reciben por su participación en las hostilidades una remuneración superior al salario del puesto correspondiente en las fuerzas armadas de Francia. A los ucranianos que viajaron desde Francia a Ucrania para participar en el conflicto, incluidos los «vacacionistas» de la Legión Extranjera Francesa, incluso si tienen la ciudadanía francesa, no se les califica como mercenarios, ya que las personas procedentes de un país que sea parte en un conflicto armado, no pueden considerarse mercenarios.

Las funciones de apoyo militar se delegan a menudo en unas EMP «desechables», que reclutan al personal de los niveles inferiores «sobre el terreno». Un esquema similar se usa en Ucrania. Los instructores suelen ser ex militares de la Legión Extranjera Francesa, nativos de los países correspondientes. La amplia base de personal de ex legionarios simplifica la creación y el uso de las EMP «desechables» para resolver tareas con probable uso de la fuerza y/o participación en enfrentamientos armados.

Alrededor de 100 EMP francesas trabajan en el mercado internacional. Por regla general, las encabezan antiguos oficiales de la gendarmería, con menos frecuencia, miembros retirados de los servicios secretos. La mayoría de tales empresas se crean por un periodo limitado para realizar tareas determinadas (por ejemplo, Byblos, de Lyon, se encargó de evacuar a ciudadanos franceses de las zonas de combate en la fase inicial de la operación militar especial (OME) en Ucrania).

Las EMP francesas más famosas incluyen:

Aeneas Groupe. Fundada en 2004. Presta servicios de asesoramiento, seguridad, defensa, así como la capacitación del personal en Francia y en el extranjero.

Anticip. Realiza diversas tareas en zonas de combate: gestión de crisis, protección física, escolta armada, protección de objetos. Operó en Irak y Afganistán. Tiene sucursales en Nigeria y los Emiratos Árabes Unidos.

Chiron. Participa en el entrenamiento de las fuerzas especiales ucranianas. Los instructores son ex militares y empleados de los servicios secretos franceses.

Défense Conseil International (DCI). Una de las principales empresas de este perfil. El Ministerio de Defensa de Francia la utiliza tácitamente para llevar a cabo una amplia gama de tareas en pro de los países amigos, donde, por alguna razón, no es conveniente usar las fuerzas armadas francesas. Cuenta con 23 centros de capacitación en Francia y sucursales en 50 países (Brunéi, India, Qatar, Kuwait, Malasia, Emiratos Árabes Unidos, Arabia Saudita, Singapur, etc.). Organiza entrenamiento de combate para las fuerzas terrestres, aéreas y navales, fuerzas especiales, así como la capacitación en el ámbito de la ciberseguridad y la guerra electrónica, la interacción de varios tipos de tropas. DCI maneja seis EMP subsidiarias, la más famosa de las cuales se llama La Cofras, que fue contratada por las organizaciones internacionales para el desminado en la zona del Golfo Pérsico, Angola y Mozambique.

Gallice Défense es un grupo de empresas con las sedes en Francia, Europa y África. Fundada en 2007. Sus especialistas trabajan con contratos de corta duración en los países del Sahel, América Latina y el Caribe, Europa, Sudeste de Asia y en el Oriente Medio.

Geos. Fue fundada en 1998 por el ex empleado de la Dirección General de Seguridad Exterior (inteligencia exterior), Stéphane Gérardin, para cumplir misiones especiales en el extranjero. Suele estar compuesta por ex empleados de servicios secretos, el Ministerio de Defensa y el Ministerio del Interior. Se especializa en ofrecer a clientes gubernamentales servicios de asesoramiento, inteligencia económica y análisis de evaluación de riesgos para grandes proyectos en diversas regiones del mundo, pero también puede garantizar seguridad física y protección. Tiene oficinas en Alemania, Arabia Saudita, Argelia, Argentina, Bélgica, Brasil, Chile, China, Colombia, Libia, México, Nigeria, Panamá, el Reino Unido, Venezuela y Ucrania. Opera en más de 80 países. Esta empresa participa activamente en los programas de entrenamiento para los soldados de las FFAA de Ucrania. Desde junio de 2022, ha estado reclutando a voluntarios para participar en los combates del lado de Kiev. En total, ha reclutado al menos 2.000 personas. Recibe la financiación a través del Fondo Europeo para la Paz. Los candidatos se capacitan en los países de Europa del Este.

Groupe Corpguard. Fundada en 2006. En 2016, firmó un contrato con el gobierno de Costa de Marfil en el marco de una operación para mantener la paz y estabilidad en el país.

Salamandre. Fundada en 1996. Reúne a especialistas en inteligencia, contraespionaje y complejo nuclear. Tiene estrechos vínculos con la Dirección General de Seguridad Exterior de Francia y a menudo actúa en intereses de esta Dirección.

KBS Sécurité. Fue fundada en 2007 en Lyon como una empresa especializada en la venta de armas y equipos militares. Actualmente, ofrece servicios de seguridad. Opera en Europa, Oriente Medio y el Norte de África.