Respuesta ofrecida por la portavoz del MAE de Rusia, María Zajárova, a la pregunta de los medios en relación con otro ataque asestado por el régimen kievita contra instalaciones energéticas de Rusia

Pregunta: El Ministerio de Defensa de Rusia, ha comunicado que en la madrugada del 28 de marzo, las FF.AA. de Ucrania han asestado un golpe doble contra la planta de medición de gas “Sudzha”, empleando, según información preliminar, lanzamisiles múltiples HIMARS. Quiere comentarlo.

Respuesta: Estamos al tanto de este comunicado. Hay razones para suponer que el apuntamiento y la designación del objetivo a la hora de asestar golpes se realizaban a través de sistemas satelitales franceses, mientras la introducción de coordenadas y el lanzamiento corrieron a cargo de los técnicos británicos. La orden de lanzamiento fue dada desde Londres. Hace una semana, el 21 de marzo, la planta ya fue objeto del ataque terrorista. El régimen kievita ordenó a sus uniformados hacerlo volar por el aire al retirarse de la provincia de Kursk. Ahora, tras el ataque con misiles, la planta de medición de gas “Sudzha” está de hecho destruida.

El 28 de marzo, la Defensa Antiaérea de Rusia interceptó y derribó en la provincia de Sarátov 19 drones ucranianos que intentaron atacar la refinería de Sarátov.

No son, ni mucho menos, los primeros ataques terroristas lanzados por las FF.AA. de Ucrania después de que el pasado 18 de marzo, fueran prohibidos los bombardeos de semejantes instalaciones. Los golpes se asestaban contra empresas de la industria del gas, plantas de distribución de energía eléctrica, depósitos de petróleo, incluidos los pertenecientes al Consorcio Internacional de Tuberías del Caspio, en las provincias de Briansk, Kursk, Belgorod, Crimea y el Territorio de Krasnodar.

El terror desatado por el régimen kievita contra el sector energético ruso, vuelve a testimoniar su incapacidad de cumplir los acuerdos. Como es sabido, Vladímir Zelenski apoyó públicamente la moratoria sobre los golpes contra las instalaciones energéticas de Rusia y de Ucrania, pero no hizo nada para observarla.

Lo ocurrido confirma que Kiev carece de la voluntad política de acordar la paz. Esta capital sique pensando en categorías de la guerra, se propone escalar el conflicto y está dispuesto a cometer cualesquiera provocaciones con tal de estorbar los esfuerzos encaminados al logro de un arreglo definitivo de la crisis ucraniana.