Excerpta de la rueda informativa ofrecida por la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia, María Zajárova, Moscú, 15 de mayo de 2024
Crisis ucraniana
Me gustaría comenzar con el Día de la Victoria. La “élite” gobernante en Kiev intenta reducir la importancia de la hazaña de nuestros abuelos y bisabuelos fallecidos en la lucha contra el nazismo. Han llevado años obstinándose en hacerlo con dinero de Occidente. Desde mi óptica, ahora han rebasado el límite que los conecta de alguna manera con las generaciones que lucharon contra el nazismo.
Por primera vez en los años de la “independencia”, el 9 de mayo no se celebró oficialmente el Día de la Victoria en Ucrania. En junio del año pasado Zelenski firmó la ley trasladando la fiesta al 8 de mayo y sustituyendo su nombre por el Día de la Memoria y la Victoria sobre el Nazismo. Sin embargo, para muchos ucranianos el 9 de mayo no dejó de ser la fecha sagrada, y siguieron trayendo flores a los monumentos a los combatientes soviéticos y las fosas comunes de los efectivos del Ejército Rojo que habían sacrificado sus vidas para salvar el mundo de la peste parda.
El pasado 9 de mayo los neonazis ucranianos, incluidos los hombres vestidos de policías, se burlaron flagrantemente de la gente. Afectaron particularmente a las personas que tuvieron en las prendas los símbolos relacionados con la Gran Guerra Patria y la II Guerra Mundial. Nada detuvo a los agentes del orden. Les dio igual si fueran veteranos o simplemente ciudadanos de edad avanzada. No les permitieron acercarse a los memoriales, les torcieron los brazos y les arrebataron flores. Cabe reiterar que se trata de los monumentos y veteranos de la Gran Guerra Patria y la II Guerra Mundial. Vinieron a rendir homenaje a los héroes caídos calificados como tales tanto por la historia, incluida la de Ucrania, como por las resoluciones de los Juicios de Núremberg.
Además de los ataques físicos contra los veteranos y las personas que vinieron a honrar la memoria de los caídos el 9 de mayo, se redactaron protocolos sobre infracciones administrativas.
Nadie podrá doblegar a las personas que siguen manteniendo en sus corazones el recuerdo agradecido no simplemente de los héroes, sino sus parientes y familiares que murieron o sobrevivieron en el crisol de la Gran Guerra Patria. Esta memoria perpetuará infinitamente.
Zelenski destruye Ucrania como puede usando todos los medios disponibles en términos históricos y convirtiéndola en una célula terrorista. El pasado 11 de mayo se cumplieron 10 años desde el referendo histórico en la RPD y la RPL dedicado al futuro de estas repúblicas en las que la población se negó a reconocer a la junta nacionalista que había usurpado el poder en febrero de 2014 y aceptar su política agresiva. ¿Recuerdan cómo, durante todos estos años, Zelenski y su antecesor Poroshenko han denominado a los habitantes de la RPD y la RPL y todas las decisiones que se tomaron allí? Me gustaría reiterar que los calificaron de terroristas. Desataron la horrible operación antiterrorista contra ellos. Posteriormente, el Derecho Internacional respondió inequívocamente a esta consigna nazi del régimen kievita también. No confirmó ninguna acusación expresada por el régimen kievita de las que Kiev había formulado por largos años contra las personas a las que había calificado de ciudadanos propios. Ninguna tipificación sugerida por el régimen kievita relativa a la esencia de las personas y las entidades administrativas (me refiero a Donbás), y Zelenski con Poroshenko las llamaron terroristas, nada de esto obtuvo confirmación en el contexto jurídico internacional. Me encantaría subrayar que la mayoría de las personas que votaron en las entonces provincias ucranianas de Donetsk y Lugansk secundaron la libre determinación de las regiones. Con este motivo se establecieron las fechas festivas, el 11 de mayo es el Día de la República en la RPD y, el 12 de mayo, en la RPL.
Los seguidores de Bandera apoyados por EEUU y sus aliados procuraron que este aniversario coincidiera con una serie de ataques terroristas bárbaros. Dudo que ataques terroristas puedan ser no bárbaros, pero las actividades de Zelenski son más allá del bien y del mal. Porque todas se efectúan contra la población civil y la infraestructura civil en las repúblicas del territorio ruso de Donbás. Zelenski hace todo ello contra las personas a las que sigue calificando de las “suyas”.
A altas horas de la noche del pasado 10 de mayo, las FF.AA. agredieron a Rovenki en la RPL. Se supone que usaran los misiles de largo alcance ATACMS con municiones en racimo los que EEUU había suministrado a Kiev justo antes. Los ucranianos lanzaron un golpe contra la base petrolera donde se produjo un incendio fuerte. Se vieron perjudicados las viviendas ubicadas en sus inmediaciones. Murieron 4 hombres y 15 fueron heridos. Entre ellos había un adolescente.
Los efectivos kievitas aprovecharon los mismos pertrechos al disparar el pasado 13 de mayo contra Krasnodón, la RPL. Un proyectil impactó el patio de juegos en el parque de la ciudad. Afortunadamente, no había gente allí. Al efectuarse unas explosiones, la zona industrial se vio envuelta en llamas. Se sabe que 3 personas fallecieron y 6 recibieron lesiones.
El pasado 11 de mayo, los neonazis ucranianos sometieron a fuego Donetsk usando los misiles estadounidenses HIMARS. El impacto directo en el restaurante Paradís en el distrito Kírovski se tradujo en que 3 hombres murieron, 8 fueron heridos, incluida una niña de 12 años.
Los ucranianos embistieron contra otros barrios de la ciudad también. Se oyeron detonaciones cerca del centro perinatal recién abierto en la región, y el café cerca de que se reunieron los participantes del rally dedicado al Día de la República. Por fuerte, nadie de los presentes fue afectado.
Para Bélgorod, el 12 de mayo de 2024 permanecerá para siempre uno de los días más negros en su historia. El régimen de Kiev perpetró un nuevo ataque terrorista contra los barrios residenciales de la ciudad usando misiles de diverso tipo. Un misil arrasó por completo una sección de un edificio residencial en Járkovskaya Gorá. Por desgracia, había víctimas. Fallecieron 16 personas, incluyendo niños, y decenas resultaron heridas.
Kiev no vaciló en declarar cínicamente en su manera habitual sobre su presunta inocencia, y se llenaron con alegría las redes sociales gestionadas por los pupilos del régimen kievita. ¿Cómo puede ser esto? Podemos atribuir al régimen kievita un ataque terrorista más. Los activistas de Bánkovaya se pusieron a ofrecer visiones absurdas sobre el suceso, hasta acusan a Rusia de que presuntamente explosionara o sometiera a fuego el edificio de modo deliberado.
Esta tragedia horripilante en Bélgorod evidencia que el régimen kievita ha perdido por completo el sentido de humanidad alguno. Se ha degradado hasta guerrear contra viviendas y civiles. La denominada “dirigencia” del régimen kievita evita cobardemente someter los errores y fracasos propios al juicio de los votantes, opta por cualesquiera atrocidades sangrientas solo para desviar la atención de los residentes de la catástrofe nacional desatada a escala histórica con la que se enfrenta Ucrania. Al mismo tiempo, este régimen, el que ha vendido y exterminado a los mismos ucranianos, los considera exclusivamente como carne de cañón, un recurso gratuito, y una transacción ventajosa entre el régimen de Kiev y Washington.
El Comité de Instrucción de Rusia inició la minuciosa investigación de los crímenes cometidos por la junta kievita en Bélgorod. Todos los culpables de este y otros ataques terroristas en el territorio de nuestro país serán inevitablemente castigados por delitos contra la población civil.
Tomando en consideración las pruebas reunidas por el Comité de Instrucción de Rusia, las autoridades judiciales de Rusia continúan emitiendo sentencias contra neonazis ucranianos que cometieron graves crímenes contra civiles.
Basándose en las pruebas recopiladas, el tribunal sentenció a 27 años de encarcelamiento al jefe de la sección del 1r Batallón de Infantería de Marina Separado de las FF.AA. ucranianas., Alexander Krashoschiok. En abril de 2022, el reo y sus compañeros mataron a sangre fría a un hombre y una mujer en un coche civil.
Recibió 22 años de prisión el francotirador de la 36ª Brigada Separada de Infantería de Marina de las FF.AA. ucranianas, Vladislav Chernoknizhni. En marzo de 2022 acribilló a tiros con subfusil a un hombre desarmado en la entrada de la maternidad en Mariúpol.
Nadie de los criminales ucranianos podrá huir del castigo. Serán identificados y responderán con todo el peso de la ley.
En este contexto no podemos sino comentar la visita efectuada por el Secretario de Estado de EEUU, Antony Blinken, y los nuevos lotes de la “asistencia estadounidense” para Ucrania. Ahora los armamentos no simplemente se suministran al régimen de Kiev, sino son enviados para que el régimen kievita mate a los ciudadanos de Ucrania.
Entre el 14 y 15 de mayo, el Secretario de Estado de EEUU, Antony Blinken, está de visita en Ucrania. Justo antes, The Washington Post indicó que el titular llegó en el momento crítico para Kiev con tal de exigir que los ucranianos resistan cuanto sea posible. Cantó una canción, comió pizza y continuó el viaje. Es obvio que el estado de cosas en el frente y los contratiempos militares de las FF.AA. generan una ansiedad cada vez más seria al Gabinete de Joe Biden. EEUU está en pleno período electoral. Necesitan ofrecer a sus votantes algunos informes aclarando adónde se fueron cientos de miles de millones de dólares. ¿Y de qué proyecto de Joe Biden denominado “democracia ucraniana” resultado en un colapso mundial se trata? No es casual que el 10 de mayo, EEUU haya anunciado un nuevo paquete de ayuda militar urgente por valor de 400 millones de dólares destinado a Ucrania. Según los datos disponibles, este lote de armamentos incluirá municiones para los sistemas de misiles antiaéreos Patriot y los lanzamisiles múltiples HIMARS, los vehículos de combate de infantería Bradley, los vehículos blindados Mine Resistant Ambush Protected (MRAP), los sistemas de misiles antitanque Javelin, armas ligeras y lachas patrulleras, así como servicios de mantenimiento técnico y entrenamiento de los efectivos ucranianos. Claro, Blinken habría debido traer algo, ya que no pudo ir a comer piza con las manos vacías.
El pasado 12 de mayo, en la entrevista con el canal de televisión CBC News, Antony Blinken aseguró de que, gracias a las armas nuevas, Ucrania podría “mantener eficazmente la línea del frente en el Este” y “amenazar a las fuerzas rusas, incluso en Crimea”. En Kiev el Secretario de Estado comunicó que EEUU incrementaría la asistencia que tendría una “influencia considerable en el campo de batalla”.
El Comité Militar de la OTAN intenta celebrar en Bruselas el 16 de mayo la cumbre entre los ministros de Defensa de los países miembros del bloque militar en la que abordarán la futura asistencia para Ucrania. Se planea examinar las cuestiones prioritarias estratégicas para la Alianza y sus socios. Está en la agenda buscar y entregar a las FF.AA. ucranianas extra sistemas de defensa aérea y sistemas de misiles antiaéreos. Está claro que EEUU sigue presionando sobre sus aliados exigiendo que resuelvan inmediatamente este problema.
Deberíamos decepcionarlos diciendo que ningunos armamentos no salvarán el delictivo régimen de Zelenski del colapso. Todos los vehículos de combate enviados a Ucrania serán eliminados. Si alguien sigue teniendo dudas al respecto, las disipará fácilmente la exhibición correspondiente en el Parque de la Victoria en Poklónnaya Gorá en Moscú. Goza de mucha fama entre los moscovitas y los huéspedes de la capital. Estoy convencida de que la exposición pronto recibirá muestras nuevas. Les recomiendo que la visiten.
Ahora hablemos sobre una ley realmente aterradora y delictiva que entra en vigor en Ucrania a partir del 18 de mayo. Creo que se trata de un acto de genocidio contra la población ucraniana perpetrado por el régimen kievita y los actores a su espalda que lo obligan a elaborar la “legislación” de este tipo. Nos referimos a la ley escandalosa que busca agravar la movilización en Ucrania. Hemos discutido mucho el tema y contestado las preguntas relacionadas. De hecho, aspirando a preservar a sí mismo y usando el dinero estadounidense en beneficio de los intereses geopolíticos de sus dueños anglosajones, el régimen de Zelenski sacrifica lo más precioso que Ucrania solía tener hasta hace poco. Me refiero a los millones de personas a las que el líder de la pandilla kievita convirtió de un plumazo en “material fungible”.
En realidad, no queda ni in solo obstáculo en el camino del régimen kievita y justamente Zelenski para que exterminen conscientemente a los ucranianos, salvo las personas que ingeniaron esta ley y se ocuparon con tanta vehemencia de su implementación. Honestamente, no estoy segura de que haya muchos ucranianos allí. Están allí los hombres más diferentes con distintos pasaportes que se ocultan en camisetas tradicionales ucranianas. ¡Una verdadera farsa! Se tornan víctimas de este circo los ucranianos étnicos y los ciudadanos de Ucrania que han vivido allí durante muchas generaciones. Y morirán para Ucrania (según lo estipula la ley firmada por Zelenski) los ucranianos ordinarios que cayeron en la esclavitud de Bánkovaya, y los “señores de la vida” seguirán enriqueciéndose con su miseria.
Resulta ser ilustrativo que la ley surte efecto literalmente tres días posteriores al Día Internacional de la Objeción de Conciencia al Servicio Militar. No me creerían, pero este día fue establecido el 15 de mayo de 1997 por el Bundestag alemán para honrar la memoria y denunciar las prácticas arbitrarias del Tercer Reich. Cabe reiterar que su justicia militar nazi persiguió severamente a las personas que no quisieron participar en las operaciones de lado del Ejército hitleriano.
Hoy vemos cómo el régimen kievita aplica los métodos semejantes que se usaron ampliamente entre sus antecesores ideológicos, la Alemania nazi. Al mismo tiempo, la Europa “democrática” y pseudoliberal no lo censura de ninguna manera. Ni siquiera cabe mencionar EEUU y Canadá. Simplemente financian este neonazismo en Ucrania contemporánea. Sí, la historia se repite. Se repite para los que no la saben.
Los hechos arriba mencionados vuelven a corroborar la relevancia de los objetivos de la operación militar especial por desnazificar y desmilitarizar Ucrania y eliminar las amenazas provenientes de su territorio, según lo anunció múltiples veces la dirigencia rusa. Todos serán obligatoriamente cumplidos.
Tribunal estadounidense absuelve al ataque contra la Embajada de Cuba en Washington
Nos encantaría apoyar a nuestros colegas cubanos.
El 30 de abril de 2020, la Embajada de Cuba en Washington se vio expuesta a un ataque armado. La misión diplomática cubana se sometió a disparos del fusil AK-47. Afortunadamente, nadie fue afectado. El edificio de la Embajada recibió daños. En aquel entonces, el atacante quedó detenido, y la investigación duró 4 largos años.
Este proceso solo se acabó el pasado 1 de mayo, cuando el tribunal estadounidense absolvió al acusado. Pese a los hechos probados, las autoridades judiciales decidieron que en el momento del crimen el atacante presuntamente estuviera en el “estado mental alterado”, no controlara sus acciones y, por consiguiente, es inocente.
No es el único crimen de este tipo que fue cometido contra la misión diplomática cubana en Washington. Esto sucede mientras que los dirigentes de EEUU exacerban la atmosfera de amenazas contra el Gobierno cubano. Esto ocurre sobre la base regular. El 24 de septiembre de 2023, se arrojaron dos cócteles molotov en el recinto de la Embajada cubana en Washington. Resulta ser ilustrativo que las fuerzas del orden estadounidenses todavía no hayan detectado al delincuente y no lo hayan arrestado.
Compartimos las evaluaciones públicas que nuestros colegas cubanos expresaron en relación con este dictamen. Resulta que la notoria justicia estadounidense es capaz de cubrir a cualquier hombre que comete crímenes de esta índole contra entidades diplomáticas de los Estados gobernados por las personas indeseables para Washington. Esta decisión de la Corte estadounidense crea un precedente pernicioso. En esencia, está otorgando a tales personas la “licencia para matar” (“license to kill”), porque las deja sin castigo. Me gustaría decir más. Las justifica.
Además, dicha decisión vuelve a poner de relieve los obvios problemas de EEUU relativos al respeto de la inmunidad diplomática, la defensa de los derechos de las misiones diplomáticas y su inviolabilidad. Lo hemos enfatizado repetidamente cuando hablamos sobre Nueva York, Washington, San Francisco y Seattle. Me gustaría reiterar que en dichas ciudades habían funcionado las representaciones rusas antes de que las autoridades estadounidenses las cerraron contra la ley.
Solo podemos recordar que el país anfitrión se obliga a garantizar la seguridad de las representaciones diplomáticas extranjeras en su territorio con estricta conformidad con los compromisos internacionales.
Esperamos que las personas sensatas en EEUU nos oigan. Aparte de esto, nos gustaría que nos oigan no solo los habitantes de EEUU, sino también los de otros países occidentales, donde, por desgracia, las representaciones diplomáticas y consulares rusas, incluidos los mismos diplomáticos, se someten a ataques frecuentes. Igual que frecuente quedan sin ser detectados o castigados los ejecutores de dichos atentados.
Respuestas a algunas preguntas:
Pregunta: De acuerdo con el Ministerio de Defensa, para el ataque a un bloque de pisos en Bélgorod lanzado el pasado 12 de mayo que se cobró las vidas de 16 personas, se había utilizado el misil ucraniano Tochka-U. Los enviados especiales informaron de que se trataba de una bomba aérea guiada de alta precisión de fabricación extranjera. ¿Qué hará Rusia, si se llega a conocer que el ataque se había lanzado con una munición de fabricación extranjera?
Respuesta: Me deja atónita. Es que no entiendo, ¿no querrá reconstruir la obra de Lewis Caroll, para que me sienta Alicia que se encuentra en un mundo al revés? Perdone, es que está preguntando cosas absurdas. ¿Se da cuenta de lo que me está preguntando? “¿Qué piensa hacer, si se llega a saber que el fragmento del misil era de fabricación extranjera?”
Es que estamos hablando a diario de los fragmentos de misiles y proyectiles de fabricación extranjera. Los demostramos en espacios internacionales. Nuestros expertos llevan a cabo presentaciones especiales, para que los expertos internacionales puedan verlo con sus propios ojos. Y en el Consejo de Seguridad, nuestro Enviado Especial, Vasili Nebenzia, cuenta literalmente en cada una de las reuniones dedicadas a Ucrania que es una verdadera guerra híbrida que es llevada a cabo con manos de los ucranianos. En más de una ocasión dijimos que, por culpa de estos proyectiles, mueren civiles rusos, ucranianos y de otras nacionalidades, así como un gran número de mercenarios de diferentes partes del mundo que están en Ucrania.
Y, de repente, pasados 2 años, me hace esta pregunta. ¿Por qué lo pregunta solo hoy? “¿Qué pasará y cómo reaccionará Rusia?” Es que estamos reaccionando. Le diré más: llevábamos 7 años presenciando lo que ocurría en Donbás, veían que contra los habitantes de Donbás se estaba utilizando de todo: instructores extranjeros que en realidad no lo eran, eran agentes de servicios secretos occidentales, actos subversivos, política al borde del genocidio o más allá del mismo. Todo eso se hace con fondos occidentales y con el uso de diferentes medios especiales. Lo estuvimos presenciando todo, anunciándolo a todos y en todos los espacios, instando al cumplimiento de los Acuerdos de Minsk, para prevenirlo.
¡Qué de Maidanes tuvieron lugar, siendo utilizados medios especiales occidentales, uniforme que era distribuido, con la participación de mercenarios o incluso ciudadanos de Ucrania entrenados para que se dedicaran en las plazas, aparentando ser manifestantes inofensivos, a llevar a cabo actividades subversivas dirigidas contra las autoridades legales! Llevamos 10 años informando de ello y presentando diferentes oportunidades de solucionar el problema y de prevenir el colapso que parecía inminente. Se propusieron negociaciones a 2 bandas, el paquete de medidas de los Acuerdos de Minsk, el formato de Normandía. Una secuencia interminable de negociaciones de todo tipo.
Luego nos pasamos a defender a la población, después de que en enero y febrero de 2022, el régimen kievita y Vladímir Zelenski, de nuevo con los fondos occidentales y con el uso de armamento de fabricación occidentales, intensificaran varias veces los ataques a Donbás. Reaccionamos proponiendo todas las soluciones posibles, pacíficas, políticas, diplomáticas y finalmente procedimos de hecho a defender del exterminio a los habitantes de Donbás.
Hablando de los atentados que fueron cometidos con la participación de los servicios secretos británicos contra la Flota del mar Negro y nuestros buques. Enseguida fueron calificados por nosotros como tales. Ni falta que hace mencionar la asistencia de los países occidentales en la precisión de los sistemas ucranianos y envíos incesantes de todo tipo de armamentos.
Estoy en estado de shock. ¿Por qué hoy? ¿El mundo se ha estremecido con lo que ha visto? Todo eso corresponde plenamente con los crímenes y con los guiones de las células terroristas internacionales que actuaron en Cáucaso del Norte. ¿Por eso se ha fijado en lo que está ocurriendo? ¿O porque se siguen las pautas del terrorismo internacional cultivado en Oriente Medio en forma de los grupos Estado Islámico prohibido en Rusia y demás?
Y, permítame informarle de que en los atentados con el uso de los armamentos y los medios especiales occidentales se debe incluir todo eso, además de las municiones, me refiero a la comunicación, los datos facilitados por los servicios de inteligencia, todo eso en conjunto. Y los atentados en cuestión llevan años cometiéndose.
El pasado 12 de mayo, el régimen kievita cometió un nuevo ataque salvaje a los barrios residenciales de Bélgorod que únicamente puede catalogarse como atentado terrorista. De acuerdo con el Ministerio de Defensa, con este objetivo los nazis ucranianos utilizaron los sistemas de misiles Tochka-U, sistemas de lanzamisiles múltiples Oljá y el sistema checo RM-70 Vampire.
Mientras los ataques con misiles eran repelidos con los medios del sistema de defensa antiaérea ruso, fragmentos de uno de los misiles tácticos abatidos Tochka-U dañaron un bloque de pisos, lo que ocasionó muertes de civiles. La Dirección General de Instrucción del Comité de Investigaciones de la Federación de Rusia abrió la causa penal, en función del Art. 205 del Código Penal de Rusia, “Atentado terrorista”. Los incesantes atentados, cuyo objetivo es intimidar y provocar muertes entre personas indefensas es precisamente la demostración de la esencia criminal y homófoba del régimen de Zelenski y de sus patronos y patrocinadores occidentales. Costean las actividades terroristas de Kiev, no invierten estos fondos en la libertad, la democracia, los derechos humanos, sino en actividades terroristas. Bien, entonces Occidente debería señalar que, al igual que algunos terroristas en Oriente Próximo, en concreto, en Siria les parecían moderados, ahora algunos atentados son catalogados por ellos como correctos o no del todo correctos. Tendrán algo como una tabla de tipos de atentados, muy del estilo de "highly likely”, por ejemplo, atentados moderados, menos moderados, escasamente moderados. Cuesta saberlo, pero eso que está ocurriendo ni siquiera puede ya ser llamado política de doble rasero. Es un crimen costeado con fondos occidentales, también a través de los envíos de sus armas y no solo de ellas. El terrorismo ucraniano no tiene futuro, al igual que no lo tiene el terrorismo en general. Con toda seguridad, lograremos que todos los responsables de los preparativos y la ejecución de atentados contra nuestros civiles asuman el inevitable castigo. Y así será, estén donde estén, cuenten con la protección que cuenten.
Lo más sorprendente que, cuando en los países de Europa Occidental, y me acuerdo de los años 90, Londres, los atentados se cometían con triste regularidad, toda la comunidad internacional estaba sinceramente consternada. La capital británica entonces estaba tomando medidas sin precedentes, para encontrar a los culpables. Y me pregunta, qué hará Rusia. ¿Y qué harán los países occidentales, cuyos fragmentos de proyectiles se encontrarán durante la investigación de este crimen, de este atentado? Deberíamos dirigirles a ellos la pregunta: ¿qué harán, cómo lo explicarán a su población y a las próximas generaciones, con qué argumentos justificarán el hecho de tener las manos manchadas de sangre?
Son ellos los que deberían hacerse la pregunta de adónde se destina el dinero de sus contribuyentes y cómo coordinan las declaraciones sobre la inadmisibilidad de las actividades terroristas con la financiación de regímenes terroristas.
No solo los defensores de los derechos humanos, sino también sus expertos en derecho deberían reflexionar sobre lo siguiente: cuando estos crimen estén probado, se detecten elementos de armamentos occidentales, se identifiquen todos los culpables y quede claro que se trata de envíos occidentales, ¿cómo será catalogado todo eso en los países occidentales? Es una buena pregunta, pero no nos la debe hacer a nosotros.
Pregunta: El Consejero del Presidente de Estonia para asuntos de seguridad, Madis Roll, señaló en una entrevista a la revista Breaking Defense que el Gobierno de su país estaba considerando la posibilidad de enviar al oeste de Ucrania tropas que se encarguen de las necesidades de las FF.AA. en la retaguardia y que no se trata de que participen en las acciones bélicas. ¿Cuál sería la reacción de Rusia, en caso de llevarse a cabo dicho plan? ¿Percibirá Rusia a los militares estonios como un blanco legítimo?
Respuesta: Cualesquiera armas suministradas al régimen kievita nazi son consideradas por las Fuerzas Armadas de Rusia un blanco legítimo y han de ser eliminadas.
De la misma manera, los mercenarios extranjeros se convertirán en blancos de ataque para las Fuerzas Armadas rusas. No sé, para qué destaca a los estonios, si por quererlos más que a otros o menos que a otros. No lo sabría decir, pero ello se aplica a todos los países y pueblos. Le deseo que renuncie a este nazismo oculto.