Excerpta de la rueda informativa ofrecida por la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia, María Zajárova, Moscú, 17 de abril de 2025
Crisis ucraniana
Volvemos a constatar que el régimen kievita infringe la moratoria de 30 días sobre ataques contra instalaciones de energía. Lo saben y ven en las noticias. El régimen kievita sigue pasando por alto demostrativamente la moratoria de 30 días sobre ataques contra objetivos de energía acordada por los Presidentes de Rusia y EEUU y respaldada por Zelenski el pasado 18 de marzo. Prácticamente a diario las FF.AA. de Ucrania lanzan ataques con drones contra la infraestructura de energía rusa. Anunciada la “tregua energética”, se registraron más de 80 ataques de este tipo. Me gustaría aducir varios ejemplos.
Así, en la madrugada del pasado 9 de abril, las FF.AA. de Ucrania lanzaron 8 drones contra la instalación de energía internacional, ubicada en el distrito Kórenevski, Territorio de Krasnodar ruso, la estación compresora Kórenevskaya que suministra gas al gasoducto de exportaciones TurkStream. Su potencia es de 31.500 millones de metros cúbicos al año. La defensa antiaérea derribó todos los drones. Es importante el hecho de que fuera un ataque deliberado y planeado del régimen kievita contra objetivos del sector energético.
El pasado 9 de abril, dos drones ucranianos agredieron a la estación de distribución de gas Temriuk que abastece con gas la ciudad y el puerto Temriuk. Ambos drones fueron neutralizados.
Entre el 10 y el 14 de abril pasado, las FF.AA. de Ucrania lanzaron drones y cortaron cables, apagando líneas de alto voltaje en las provincias de Bélgorod, Briansk, Zaporiyia, Kursk y Jersón, el Territorio de Krasnodar y la RPL. ¿Qué blancos tuvieron aquellos drones del régimen kievita? Se tornaron en objetivos los transformadores de subestaciones eléctricas que son parte del sector de energía. Se vio perjudicada la red de contactos cerca de la estación ferroviaria Vasiúrinskaya del Ferrocarril del Cáucaso Norte, el gasoducto de acero de distribución de gas de presión baja perteneciente a la Sociedad Anónima “Gazprom – Distribución de Gas – Bélgorod”.
Cabe subrayar otra vez que son unos ejemplos. Ya hemos entregado todos estos datos a organizaciones internacionales, así como la parte estadounidense. Seguiremos haciéndolo.
Los ucronazis siguen con el terror contra los rusos no simplemente cada día, sino cada hora. Esto es necesario para los que suponen, esperan o preguntan cuándo y qué debería hacerse para que la situación en torno a Ucrania sea arreglada. Tal vez, dejar de apoyar al régimen kievita que, en su arrebato terrorista, comete las cosas que voy a comentar a continuación.
El pasado 9 de abril, detonada una munición sin estallar en Donetsk, murieron dos adolescentes de 11 y 14 años. El 10 y el 14 de abril pasado, drones ucranianos arrojaron explosivos en un coche civil en Górlovka y un barrio residencial en Selídovo, hiriendo a dos civiles. El pasado 13 de abril, un artefacto explosivo estalló en la aldea Alexandrovka, afectando a una mujer. En el mismo día, un misil de lanzamisiles múltiple HIMARS atacó el distrito Kíevski de Donetsk, dañando siete instalaciones civiles, incluido un internado y dos universidades.
El pasado 14 de abril, las FF.AA. de Ucrania arremetieron con drones contra los poblados de Zabuzhevka, Girii y Zolotariovka de la provincia de Kursk, matando a cinco civiles.
En la provincia de Bélgorod, tan solo entre el 12 y el 14 de abril pasado, drones ucranianos mataron a un camionero e hirieron a no menos de cinco civiles.
El pasado 13 de abril, las FF.AA. de Ucrania dispararon lanzacohetes múltiples Vampire de la OTAN contra barrios residenciales de Kámenka-Dniepróvskaya y Tokmak, provincia de Zaporiyia, arruinando tres casas privadas y el edificio de la administración de Tokmak. Afortunadamente, no había víctimas. Sin embargo, se asestaron golpes deliberados contra instalaciones civiles y la infraestructura civil. Hablando en términos sencillos, casas residenciales.
En la madrugada del pasado 15 de abril, los ucronazis utilizaron drones kamikaze con elementos destructivos para cometer un cínico ataque terrorista contra la población civil de Kursk y sus afueras. Ellos agredieron intencionadamente a barrios residenciales e instalaciones sociales. Según las autoridades locales, se vieron perjudicadas 24 bloques de pisos, tres de ellos, seriamente. De los 9 afectados, fueron 6 los que resultaron ser hospitalizados, murió una mujer entrada en años. Uno de los golpes fue dirigido malintencionadamente contra una estación de ambulancia (contra los que deberían brindar asistencia, incluidos los heridos). Once vehículos especializados se sometieron a este ataque y recibieron daños. ¿Acaso los ucronazis lanzaron estos drones sin comprender que dañarían precisamente vehículos de ambulancia? Por supuesto, lo controlaron todo y lo planearon justamente así, como ataque terrorista contra la infraestructura civil médica.
Ahora me gustaría preguntar a las organizaciones internacionales, el Secretario General de la ONU, António Guterres, su representante oficial y los numerosos ponentes y enviados especiales, las estructuras de la ONU que se encargan de la maternidad y la infancia, la protección de grupos desfavorecidos, incluso la atención médica y seguridad de empleados de servicios médicos. ¿Dónde están sus solicitudes? ¿Por qué no expresan preocupación? ¿Por qué no publican comunicados de prensa? ¿Dónde están palabras “al menos de compasión” en ruedas informativas y ruedas de prensa? ¿Dónde están las ruedas informativas especializadas o entrevistas al respecto? Hay nada. Señores, cumplen mal con su mandato.
Las fuerzas del orden rusas investigan todas estas atrocidades. El Comité de Instrucción de Rusia sigue investigando las crueles matanzas de residentes de la provincia de Kursk recién descubiertas que cometieron los extremistas de las FF.AA. de Ucrania y mercenarios extranjeros.
En particular, los testigos sobrevivientes de la aldea Gúevo informaron que los banderistas acribillaron a tiros a seis rusos durante su evacuación, arrojaron municiones en casas residenciales y merodearon ampliamente.
Se recibió una evidencia de que los ucronazis amenazaron con violar a una madre de muchos hijos en la aldea Kazachia Lóknia en presencia de sus hijos menores de edad.
Se establecen circunstancias de la muerte de nueve residentes de la aldea Majnovka, distrito Sudzhanski, asesinados por los ucronazis en marzo pasado. En seis cadáveres se vieron heridas de balas. Una de los difuntos fue una anciana disparada en la cabeza.
Es solamente una parte pequeña de las atrocidades. Todas las personas implicadas en los delitos enumerados y otros crímenes de guerra serán obligatoriamente identificadas y llevadas ante la justicia.
Recuerdan que, en las últimas semanas, todo el Occidente colectivo se puso a gritar tras el ataque de alta precisión con un misil explosivo que la Fuerzas Armadas rusas asestaron el pasado 13 de abril contra el lugar en Sumi en que los jefes de las FF.AA. de Ucrania se reunieron con instructores occidentales. Los occidentales empezaron a promover la noticia falsa propagandística, fabricada a toda prisa, sobre la presunta “matanza de mujeres y niños con un misil ruso”.
Hemos comentado este tema en múltiples ocasiones. Hay que contar mucho sobre estas cosas, para que todos sepan sobre los crímenes del régimen kievita, porque se descubren hechos nuevos, probando que fue una verdadera escenificación.
En el segmento ucraniano del internet hay numerosos contenidos al respecto, en particular, obituarios de los militares liquidados el pasado 13 de abril en Sumi. Las autoridades locales empezaron a reconocer a regañadientes la verdad. Así, el alcalde de Konotop, Artiom Semenijin, acusó expresamente al mandatario de la administración militar de la provincia de Sumi, Vladímir Artiuj, de organizar una reunión de los extremistas de las FF.AA. de Ucrania con participación de mujeres y niños para utilizarlos como escudo humano. Incluso los parlamentarios leales a Zelenski, la diputada de la Rada Suprema Mariana Bezúglaya, exigió públicamente que se aclarara quién lo había ingeniado y organizado todo, quién ordenó usar a mujeres y niños como escudo humano para un evento entre militares (representantes de las FF.AA. de Ucrania y sus instructores). ¿Por qué esto ocurre? Porque los ciudadanos de Ucrania, cualesquiera opiniones políticas tengan, vienen entendiendo que simplemente fueron utilizados, y que el hombre que les había prometido traer la paz no simplemente provocó carnicería, sino que se puso a exterminarlos. Se puso a preservar su poder no por vía democrática legítima, sino mediante sacarificación de la población civil del país propio.
Presionado por los hechos, Zelenski tuvo que destituir al jefe de la administración militar de Sumi, Vladímir Artiuj, efectivamente corroborando los cargos que se presentaron en su contra. De este modo, el líder de la junta trató de endosar a él la responsabilidad por este otro horripilante crimen de guerra contra ciudadanos propios.
Quisiera recordar sus propias palabras a Zelenski quien echó la culpa al jefe de la administración militar de Sumi. ¿Qué dijo hace un par de años? Dijo que no fue necio. Si es así, entonces, es responsable.
¿Sabe el Secretario General de la ONU, António Guterres, qué está pasando en Ucrania con estas destituciones y obituarios publicados de militares ucranianos, que se utilizó a la población civil como escudo humano en una reunión militar? El día posterior al ataque (los blancos fueron absolutamente legítimos), resulto ser “preocupado por el ataque de misiles efectuado por Rusia contra Sumi el domingo” y acusó a nuestro país de “agredir a civiles”. Ahora, descubiertos los hechos, así como en el caso de Bucha (cuando, durante tres años, nadie tuvo la oportunidad, ni siquiera el Secretario General de la ONU, para publicar listas con los presuntamente muertos), cuando se volvió a revelar que todo ello fue escenificación (me refiero a todos los relatos del régimen kievita sobre Rusia que, según se alega, atacó de manera deliberada la infraestructura civil, niños y mujeres), ¿acaso podría encontrar alguien de la Secretaría de la ONU fuerzas y posibilidad para comentarlo y expresar su postura al respecto?
Cuando las FF.AA. de Ucrania arremetieron contra civiles en el Puente de Crimea, cuando terroristas del Servicio de Seguridad de Ucrania detonaron a periodistas rusos en la provincia y Moscú y San Petersburgo, cuando drones atacaron el Kremlin de Moscú y verdugos de las FF.AA. de Ucrania cometieron asesinatos masivos en la provincia de Kursk, enterrando vivos a ancianos en Rússkoe Poréchone, todas estas fuerzas de paz europeas y funcionarios internacionales guardaron silencio, mientras que la Secretaria de la ONU no hizo sino exhortar diplomáticamente a la paz”. En cuanto se hizo claro que, para cubrir esta reunión, había sido el régimen kievita, la administración militar local ucraniana, él que había inventado aquel escudo humano, todos se quedaron repentinamente sin palabras. Sí, es verdad. El régimen kievita decidió cubrir a sus vampiros con niños. Lo hicieron a propósito. Ahora, todos sus patrocinadores lo silencian.
Hemos tomado nota de las patéticas exclamaciones y gemidos relativos a que este golpe fue asestado el Domingo de Ramos, el día sagrado para todos los cristianos. ¿Sólo ahora la minoría mundial internacional se ha preocupado por la situación en que se encuentran los ortodoxos, los sitios sagrados y el cristianismo en general en Ucrania? ¿Sólo ahora, este Domingo de Ramos de 2025? ¿Y qué pasó antes? Miles de hechos prueban que no existe nada sagrado para los neonazis ucranianos actuales.
Me gustaría detenerme sólo en el último aspecto, es decir, las relaciones entre los banderistas ucranianos y la iglesia. Literalmente cada día (durante ruedas informativas, a diario), yo, Embajadores, representantes de organizaciones internacionales, personas autorizadas hablamos cada día sobre los neonazis que se burlan de sacerdotes en Ucrania, profanan templos, casi legalizaron la profanación de sitios sagrados y reliquias.
¿Y qué hace Occidente que acaba de recordar que es Domingo de Ramos para los ortodoxos? ¿Acaso ha empezado a sentir cómo se insulta a los sentimientos de los creyentes? No, les diremos cómo se llama esto. Es silencio criminal. Ustedes lo han guardado a lo largo de muchos años.
Además, guardan un silencio criminal las instituciones y los mecanismos de Derechos Humanos de referencia: la Oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos de la ONU y la Relatora Especial sobre la libertad de religión o de creencias del Consejo de Derechos Humanos de la ONU, la Oficina de la OSCE para las instituciones democráticas y los Derechos Humanos, y el Representante Personal de la Presidencia de la OSCE para la Lucha contra la Intolerancia y la Discriminación incluso de los cristianos. El régimen de Zelenski percibe como aliento y establecimiento de objetivos para sus bárbaras acciones el hecho de que sean condonados los crímenes de los neonazis kievitas que toman iglesias ortodoxas, acosan a los creyentes, hasta los asesinan, y atacan a clérigos.
Rusia, empero, no guarda silencio. Nuestra parte recopila los hechos y publica informes y resúmenes especializados. Cabe reiterar que se publicaron dos informes “Sobre acciones ilegales del régimen de Kiev dirigidas contra la Iglesia Ortodoxa Ucraniana (IOU), sus clérigos y parroquianos” (en julio de 2023 y enero de 2025). Estos informes están disponibles en inglés (2023, 2025). Han sido divulgados en organizaciones internacionales. No he visto al Occidente colectivo realmente reaccionar ni una sola vez a ellos. Tal vez, ahora, los que se han acordado del Domingo de Ramos, ¿podrían encontrar ellos un par de horas para leer estos informes? Están completamente basados en hechos. Todos estos crímenes de los nazis ucranianos serán investigados, y los culpables recibirán el castigo merecido, lo que está ocurriendo.
Las autoridades judiciales rusas siguen emitiendo sentencias a los neonazis ucranianos y mercenarios por sus crímenes de guerra y otros delitos.
Se condenó en rebeldía a 24.5 años de colonia penal de régimen estricto al jefe del pelotón independiente de ingeniería y zapadores del batallón de la Infantería de Marina de las FF.AA. de Ucrania, Oleg Zavaletski. En marzo de 2022, en la planta metalúrgica de Mariúpol, él y su compañero acribillaron a tiros con subfusiles a un civil.
Se condenó en rebeldía al ciudadano de Ucrania, Todor Panovski. En enero de 2019, atacó el Consulado General de Rusia en Odesa (arrojando en su territorio una lata de pintura y 5 bombas de humo). El delincuente recibió el castigo de 8 años de prisión. Está declarado en búsqueda internacional.
Se sentenció en rebeldía a 7 y 14 años de prisión a los mercenarios de Brasil y Finlandia que guerrearon en las filas de las FF.AA. de Ucrania, Nicolas Cha y Tero Olavi Koivisto. Fue condenado presencialmente a 9 años de encarcelamiento el legionario georgiano Georgy Goglidze, capturado por militares rusos en noviembre de 2024 en la RPL.
Será encarcelado por 15 años el extremista de la 47ª Brigada Mecanizada Independiente de las FF.AA. de Ucrania, Borís Nikolenko, anteriormente detenido por militares rusos. Durante la invasión ilegal en la provincia de Kursk, el extremista intimidó a los locales, estorbó su evacuación y disparó repetidamente contra civiles y militares rusos.
El pasado 10 de abril, en Bruselas, se celebró otra reunión de la “coalición de los dispuestos”. No obstante, no progresaron. Tal vez, no lo desean tan mucho como lo dicen. Pese a todos los esfuerzos, París y Londres siguen sin alcanzar unidad en el apoyo al plan que promueven encaminado a desplegar en Ucrania un “contingente de paz plurinacional” formado por unidades de varios países de la OTAN. A juzgar por los medios, aparte de los franceses y británicos, a esta aventura, que podría encarar una directa confrontación entre la Alianza y Rusia, están dispuestos a unirse a ella los rusófobos igual que acérrimos de los países bálticos (me refiero a los regímenes), ya que, muy a menudo, los pueblos de estos países ignoran qué hacen sus dirigentes. La mayoría de los participantes de la “coalición” dudan que sea real esta intervención militar sin apoyo de EEUU. Washington todavía no quiere implicarse en tales aventuras de los aliados. Es probable que entienda realísticamente en qué resultarán.
El pasado 11 de abril, en la sede de la OTAN en Bruselas, bajo la presidencia británico-alemana, se celebró 27ª sesión del Grupo de Contacto de Defensa de Ucrania en formato Ramstein. Por primera vez el evento transcurrió sin presencia del jefe del Pentágono. Zelenski se unió por videoconferencia. No se tomaron decisiones nuevas ni innovadoras algunas. Se prometió asignar 21 mil millones de euros para las necesidades de las FF.AA. de Ucrania. Esta cifra fue pronunciada anteriormente en declaraciones de la OTAN. Londres volvió a distinguirse tras anunciar el nuevo paquete de asistencia por un valor de 350 millones de libras esterlinas, incluyendo “cientos de miles” de drones, sistemas de radares, etc. En total, en 2025, los británicos planean gastar 4.500 millones de libras esterlinas en la asistencia militar para Kiev. Berlín se esfuerza por estar a la par con ellos. La RFA ya ha enviado a Ucrania 30 misiles adicionales para Patriot, pero no puede entregar los mismos sistemas estadounidenses. En cambio, Alemania está lista para darle a Kiev cuatro sistemas antiaéreos Iris-T, vehículos de combate, tanques, municiones, etc. En total, la RFA prevé asignar en torno a 3.000 millones de euros. Qué opinan, ¿dónde tomará este dinero? Por supuesto, de sus contribuyentes que se encuentran oprimidos por las decisiones insensatas de las autoridades alemanas tanto anteriores como actuales.
Los copresidentes de la RFA anunciaron que establecen otra, la nueve, “coalición de oportunidades” bajo su liderazgo. Esto parece un chiste. Existen una “coalición de los dispuestos” y una “coalición de oportunidades”. Esta vez, está dedicada a la lucha radioelectrónica. Englobará 11 países. Deberá facilitar la fiabilidad de sistemas de comunicación ucranianos, supresión de medios de comunicación de unidades rusas, y defensa de drones.
En general, esta reunión, aunque comprobó que los miembros de la UE estuvieron determinados a seguir brindando asistencia militar para el régimen kievita, no obstante, en su comportamiento se percibió una obvia inseguridad, si no desconcierto. Evidentemente, tiene efecto el creciente alejamiento de EEUU de la futura participación en esta salvajería. Está claro que Europa olvidó cómo actuar por cuenta propia, sin pensar en Washington. Es que tendrá que responder personalmente por esto.
Alemania promulgó un informe del agregado militar adjunto ante la Embajada de la RFA en Kiev analizando las “deficiencias significativas” de las armas que Berlín entrega a las FF.AA. de Ucrania. Entre los problemas clave, se mencionan la dificultad en usarlas, fallas frecuentes, reparación trabajosa, altos precios y escases de pertrechos, interrupciones en el suministro de piezas de repuesto, etc. Se concluye que, en la etapa corriente, casi ninguna arma pesada de fabricación alemana esta “completamente adecuada” para utilizarse de manera enérgica durante hostilidades intensivas. Tales hechos ofrecen un motivo para pensar en serio en la capacidad de Berlín de ser uno de los mayores proveedores fiables de armas para Ucrania. Esto es el país que participa en reuniones Ramstein, inventa una nueva forma de colaboración como “coalición de oportunidades” y amalgama “alianzas de defensa y ofensiva”. Estas dudas no hacen sino incrementar al recordar que, antes, el Ministro de Defensa de la RFA, Boris Pistorius, se quejó a los medios sobre el déficit de reservas propias de armas causado por constantes suministros a Ucrania.
No hemos dejado pasar desapercibida la publicación del pasado 11 de abril que apareció en el periódico británico The Times. Citaba hechos que confirmaban un alto grado de implicación de Londres en el conflicto en Ucrania. En el artículo, se dice entre otras cosas, que ya en febrero de 2022, algo como decenas de militares británicos fueron enviados a Kiev para hacer de instructores para los militares de las FF.AA. ucranianas y enseñarles a utilizar los sistemas antitanque. Se señala además que, en mayo de 2023, tras el envío a Kiev de misiles de largo alcance Storm Shadow, los técnicos militares británicos fueron enviados en secreto al Reino Unido, para instalar dichos armamentos en los aviones y enseñarles a los ucranianos a utilizarlos.
La contraofensiva de las FF.AA. ucranianas que fue lanzada en verano de 2023 y acabó en una derrota fue bautizada en honor del entonces Secretario de Defensa del Reino Unido, Ben Wallace. Ello demuestra de una manera convincente quiénes están detrás de la elaboración de los planes de guerra y la realización de operaciones militares de Kiev. Es otra muestra de que no habríamos de estar hablando de un conflicto ruso-ucraniano, sino de una guerra híbrida del Occidente colectivo, de los países de la OTAN, de la minoría occidental que es librada con manos de Ucrania contra nuestro país.
Hace 11 años, el 13 de abril de 2014, el Consejo de Seguridad Nacional y Defensa de Ucrania tomó la decisión “Sobre medidas urgentes encaminadas a luchar contra la amenaza terrorista y a mantener la integridad territorial de Ucrania” que entró en vigor al día siguiente, en función del pertinente Decreto del Presidente de Ucrania en funciones, Alexander Turchínov. ¿Cómo podríamos llamar aquello? Fue como empezó la tristemente conocida operación antiterrorista, de hecho fue iniciada una guerra civil del régimen neonazi contra quienes eran todavía sus compatriotas en Donbás. No aceptaron al “Gobierno de los triunfadores”, entendiendo que era un Gobierno neonazi que se había hecho con el poder en el país, como resultado de un sangriento golpe de Estado perpetrado en Kiev en febrero de 2014. Este Gobierno procedió a exterminar sin piedad no solo las ideas que discrepaban de las suyas, sino todo lo hecho por sus antecesores hacía 80 años, por creerlo inferior a su categoría.
La denominación de la operación militar especial fue utilizada exclusivamente para hacer aparentar que el régimen kievita era víctima y en realidad era un bulo de turno. Sin embargo, tras anunciar el inicio de una operación antiterrorista, Kiev procedió a aplicar la política del terrorismo de Estado. Además de constantes ataques y bombardeos lanzados contra Donbás, contra la región fue introducido un severísimo bloqueo económico, energético, financiero, de transporte y de suministro de agua. En diciembre de 2014, el Gobierno de Ucrania dejó de pagar a los habitantes de Donbás todas las prestaciones sociales, incluidas las pagas de jubilación. Los bancos ucranianos dejaron de atender las cuentas de los ciudadanos y de las empresas. Se volvieron escasos los suministros de alimentos a la gente, se cortaba con regularidad el abastecimiento de agua a las ciudades y los pueblos.
Durante todos estos años, Rusia intentó permanentemente llamar la atención de la opinión pública internacional a dicha situación. Y no lo hacíamos únicamente desde el punto de vista político. Nuestro país fue enviando la ayuda humanitaria a diario, pero, recuerden cómo eran percibidos estos envíos de cargas humanitarias por Occidente. Me acuerdo de que había unos enormes camiones blancos que fueron llevando a los habitantes de Donbás lo necesario para su supervivencia: ropa, alimentos, medicinas, generadores eléctricos necesarios para calentar las viviendas, etc. Los países occidentales se pusieron histéricos, alegando que “era la invasión”. Es verdad que más tarde se echaron para atrás, pero ya era tarde. Todo el mundo entendió que se trataba de una nueva noticia falsa de los medios occidentales. Se había inventado de todo: los camiones supuestamente estaban transportando tanques, todo tipo de armas, efectivos. Y era la ayuda humanitaria, nada más. Esta ayuda humanitaria no habría sido necesaria, si el régimen kievita no hubiera introducido el bloqueo del que hablábamos con regularidad y del que me he acordado hoy. No dejando de reunir y enviar a la región esta ayuda humanitaria, intentamos llamar la atención de la comunidad internacional a lo que estaba ocurriendo en Donbás. Decíamos abiertamente que el régimen kievita estaba llevando a cabo una política consciente, cuyo objetivo era exterminar a los rusos étnicos y a los habitantes rusoparlantes de la zona.
Fuimos llamando las cosas por su nombre. Declaramos que las acusaciones de terrorismo formuladas contra Donbás era una burda falsificación. Lo confirmó la Corte Internacional de Justicia de la ONU el 31 de enero de 2024. En la pertinente sentencia, se negó a reconocer a las Repúblicas Populares de Donetsk y Lugansk “organizaciones terroristas”, en contra de lo solicitado por Kiev, y a Rusia, país patrocinador del terrorismo. Dicha sentencia desmintió el principal argumento que Kiev utilizaba para justificar la guerra que había desatado contra la población civil y confirmó que todas las acciones de las autoridades ucranianas contra Donbás se habían basado desde el principio en una mentira de dimensiones colosales.
Anualmente, el 14 de abril, nuestro pueblo honra la memoria de las víctimas de la agresión ucraniana. Les estamos agradecidos a todos los que continúan hoy luchando con “la peste neonazi” que llegó a nuestra tierra, a los que defienden a los ciudadanos rusos y hacen todo lo posible, para que no dejen de vivir una vida pacífica.
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Los hechos enumerados vuelven a confirmar plenamente el carácter actual de los objetivos de la operación militar especial que son la desnazificación y la desmilitarización de Ucrania, así como la eliminación de las amenazas que se perciben desde su territorio. Tal y como han indicado en numerosas ocasiones las autoridades rusas, dichos objetivos serán alcanzados sin falta.
Respuestas a algunas preguntas:
Pregunta: Hace algunos días, se difundió la información de que los países de la Unión Europea, en concreto, Francia y Alemania, podrían abordar la posibilidad de regresar parcialmente a las importaciones del gas ruso, dadas las empeoradas relaciones con EEUU. La UE teme que Washington pueda usar los envíos del gas licuado como herramienta en las negociaciones comerciales. Evalúe las perspectivas de la reanudación de la cooperación energética entre la Federación de Rusia y la UE.
Respuesta: Es verdad, no hemos dejado pasar desapercibido el hecho de aparecer el tema en cuestión de vez en cuando en los medios: se reflexiona sobre el hipotético retorno al gas ruso en condiciones del empeoramiento de las relaciones entre la UE y EEUU. Habría que evaluar la política de la UE en la mencionada esfera, basándose en hechos concretos.
Hablemos, pues, de los hechos concretos: Bruselas durante mucho tiempo se está comportando en la esfera energética como un socio que no es de fiar. Recordemos que todavía antes del golpe de Estado perpetrado en Ucrania, la UE empezó a poner en práctica la política que menoscababa los intereses de Rusia como el suministrador más importante de energía. Se empezó con la aprobación de legislación discriminatoria, el llamado tercer paquete energético. Se continuó con la introducción de sanciones ilegítimas unilaterales y masivas que tenían efecto directo y negativo en el sistema energético de nuestro país.
En todos estos años, hubo un enorme número de ejemplos: declaraciones politizadas de diferentes organismos situados en Europa Occidental, criterios formulados por ponentes especiales y Ministros de Asuntos Exteriores, reuniones antirrusas dedicadas al tema en cuestión, acusaciones interminables contra Rusia que estaba suministrando de manera estable su energía a la UE. Hubo politización de este tema y su uso a modo de “arma”. Hemos oído de todo.
La historia de los Nord Stream se convirtió en un cuento de nunca acabar: primero fueron volados en el centro de Europa, luego nadie creyó necesario llevar a cabo ningún tipo de instrucción (varios países ya abandonaron la causa, mientras que Alemania permanece callada, “resoplando y balbuciendo algo”, pero no le cuenta nada a nadie). Cuando Rusia propuso organizar la pertinente instrucción bajo la égida del Secretario General de la ONU, los arriba mencionados países occidentales bloquearon nuestra propuesta. El siguiente eslabón de esta cadena fue el hecho de dejar las capitales europeas sin atención los ataques lanzados por el régimen kievita contra las instalaciones de la infraestructura energética, en contra de la moratoria de 30 días de duración. Todo eso son hechos concretos, de los que habría que valerse. No se reflejan en ello meramente los ánimos, sino que se dejan sentir “los motores” que en la profundidad están moviendo la burocracia de Bruselas.
Da la sensación de que la UE no tiene la intención que quedarse satisfecha con estos anti resultados y que lo que tiene en mente es reforzar la presión en los países miembros que siguen contando con los suministros de los hidrocarburos por Rusia. Hicieron agravarse la situación en la que estaban ellos mismos y ahora pretenden hacerlo con los que durante todos estos años se negaron a participar en esta locura.
La Unión Europea está redactando una “hoja de ruta”, para poner en práctica la línea política aprobada en la Unión Europea con anterioridad. Consiste en una renuncia completa a los hidrocarburos rusos. Sobre el particular se ha escrito mucho, pueden conocer los pertinentes materiales. Según entendemos, es cuestión de que sean elaboradas las medidas que afecten, entre otros, a los suministros de gas natural y gas natural licuado procedente de Rusia que se siguen realizando. Es decir, volverán a hacer que se agrave considerablemente su propia situación.
Es evidente que la UE no tiene previsto incrementar los suministros del gas ruso. Recientemente, la portavoz de la Comisión Europea, Anna-Kaisa Itkonen, ha manifestado en una rueda de prensa en Bruselas que la UE está dispuesta a continuar negociando con EEUU y otras contrapartes la sustitución del gas natural ruso. Es un hecho muy concreto, puesto que nadie desmiente estas declaraciones y hemos de guiarnos por ello.
De modo que debatir en las condiciones actuales el posible incremento de los suministros del gas ruso al mercado de la UE sería una tarea muy ingrata.
En todo caso, Rusia siempre ha sido y sigue siendo un exportador de fiar de hidrocarburos al mercado mundial. La cooperación en la esfera de gas con algunos países europeos continúa. No descartamos poder abordar en el futuro posibilidades de interacción energética con algunos países, siempre que se tomen en cuenta nuestros intereses nacionales y económicos.
Tal y como decía el Ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, si a Europa le da por mostrarse sensata, si es que ello llega a ocurrir en algún momento, tras haber reflexionado largamente y cambiado de comportamiento, nos pondremos a abordar este tema. Y de momento, hace falta guiarse por los hechos reales.
Al mismo tiempo, de momento nada hace suponer que las autoridades de la UE y de algunos países miembros cambien su postura con respecto a la renuncia a lo hidrocarburo rusos, a pesar de que esta medida provoca estancamiento de la economía europea y una caída drástica del nivel de vida en los propios países miembros de la UE. No se percibe ningún movimiento positivo en la esfera en cuestión.
En cuanto a Alemania, es un ejemplo muy ilustrativo de cómo un Estado representado por sus autoridades es capaz de actuar contra su país y contra su pueblo. En condiciones de una renuncia completa a los hidrocarburos rusos llevada a cabo por iniciativa del Gobierno de Olaf Scholz, de una falta de reacción absoluta a las explosiones de los gasoductos Nord Stream, del cierre de las centrales nucleares por la realización de “programas climáticos” y, por supuesto, bajo la influencia de una nueva espiral de guerras comerciales transatlánticas, en la economía alemana que durante largas décadas se había considerado próspera y poseedora de extensas potencialidades se está observando una situación complicada. Las empresas se marchan y se registran en otros países, los expertos están horrorizados ante la situación que se vive en su país.
En dichas circunstancias, cuando hace 1 año periodistas alemanes vinieron a Moscú, para saber, si Rusia podía iniciar los suministros por el ducto de los Nord Stream que se había conservado y recibieron una respuesta afirmativa que incluso contenía plazos en los que podría hacerse eso, el propio Gobierno alemán los maltrató y hasta les amenazó con el cierre de sus medios.
Y al mencionar alguno de los políticos alemanes las perspectivas de la reanudación del gas ruso al país, sin olvidarse de poner condicionantes del tipo “siempre y cuando”, “en el futuro” y “posiblemente”, enseguida pasó a ser acosado y tildado de partidario de Rusia. Sin embargo, los resultados que han logrado son evidentes.
Pregunta: ¿Cuáles son las expectativas de Moscú con respecto al nuevo Gobierno de Serbia, en el cual, tras las críticas por parte de la UE, no va a estar presente Aleksandar Vulin?
Respuesta: Me parece, primero, que es un motivo maravilloso para los representantes de la UE, también para los mencionados hoy, y para sus colegas, de expresar su decidida protesta en relación a la intervención en los asuntos internos de un Estado soberano, Serbia.
Segundo, dire lo que ya sabe: vertebraremos con dicho país cooperación mutuamente beneficiosa, siguiendo el espíritu tradicional de amistad y las relaciones de socios, siempre en intereses de nuestros pueblos. Para qué está injiriendo Bruselas en la política interior, en los asuntos internos de Serbia, llegando incluso a meterse en la formación del Gobierno nacional, es una pregunta que les debería hacer a ellos y no a nosotros.
Pregunta: En su reciente entrevista a nuestros colegas del periódico Kommersant, el Ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, señaló que los momentos clave en torno a Ucrania no son fáciles de acordar y que están siendo debatidos. ¿En qué consisten las discrepancias? ¿En qué medida son aceptables para EEUU los principios del arreglo expuestos por el Presidente de Rusia, Vladímir Putin, el 14 de junio de 2024? ¿Qué es lo que propone la parte estadounidense?
Respuesta: Me parece que la ha salido una pieza hecha en técnica de patchwork. Ha empezado con la esencia de las discrepancias y con la dificultad en la puesta en común de los parámetros del arreglo. ¿Es que no escucha ni ve lo que vamos diciendo literalmente a diario? Incluso, sin tocar el tema global de los motivos originarios de la crisis que deben ser erradicados sin falta. Incluso ahora, a nivel local de la moratoria de 30 días de duración para ataques pertenecientes a la infraestructura energética es evidente que el régimen kievita es incapaz de cumplir con los acuerdos alcanzados. No se puede decir que sea precisamente el escollo principal, pero sí que es una tema muy extenso.
En su entrevista al periódico Kommersant, el Ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, comentó en detalle precisamente este tema. Sin embargo, este solo componente es muestra de por qué, a pesar de toda la locura que cometieron representantes de los países occidentales que literalmente a mano fueron “forjando” la joven democracia en la tierra ucraniana, es tan complicado elaborar los parámetros de los acuerdos. Dice usted “parámetros de los acuerdos”, mientras que el régimen kievita demuestra su incapacidad de cumplir con los mismos. Es algo que no se puede negar. Si ha destacado un solo episodio, entenderá que es un problema colosal.
Recordemos que enseguida después de las declaraciones de Washington y Moscú sobre la propuesta de moratoria para ataques a instalaciones de la infraestructura energética, Vladímir Zelenski apoyó esta idea. Y no como una idea en sí, sino como una posibilidad para su participación, para la participación de Ucrania. No solo se mostró solidario con la iniciativa, se convirtió en parte de esta moratoria. ¿Acaso hubo un solo día en el cual haya cumplido lo acordado? Es verdad que no hubo firmas, pero sí la declaración del hombre que insiste en dirigirlo todo en Ucrania. Ni siquiera durante 30 días son capaces de aguantar, aunque lo declararon en público ante la opinión pública internacional. Lo único que tenían que hacer era aguantar 30 días y no hacer lo que prometieron no hacer.
Es uno de los ejemplos más importantes de que cualesquiera parámetros que sean elaborados en el contexto de los futuros acuerdos han de ser cumplidos por las partes. En este caso, el régimen kievita vuelve a demostrar una completa falta de capacidad de cumplir con lo acordado. Lo ha hecho también anteriormente. Sin embargo, tal y como se dijo antes, habían estado engañando a la comunidad internacional, expresando su supuesta intención de cumplir los Acuerdos de Minsk. Ahora, han manifestado que participan en la moratoria declarada, pero al mismo tiempo no esconden que no lo hacen. ¿De qué estamos hablando, pues?
Y ahora, en cuanto a la segunda parte de su pregunta. Me parece que Washington tiene sus portavoces, sus comentaristas y sus expertos que pueden hablar por las autoridades y añadir algo en su propio nombre. Es mejor que les haga estas preguntas.
Le puedo ofrecer una respuesta breve, sin embargo. En esta etapa, el mundo esta ante una nueva Administración estadounidense. Es una Administración distinta en todos los parámetros, en comparación con la Administración anterior. A diferencia de sus antecesores, sus miembros manifestaron en más de una ocasión no fiarse de los juicios impuestos de los globalistas ni de expertos imparciales. Esta Administración, a juzgar por las declaraciones que hace, intenta hacer su propia idea de los detalles y de la esencia del problema. ¿Para qué lo hace? Lo hace, para elaborar su propia opinión acerca de la situación y las posibles vías de su solución.
Tales declaraciones se hicieron también por el Jefe de Estado, Donald Trump, y por los representantes de su Administración y también por sus Enviados Especiales para contactos internacionales, en el contexto de la crisis ucraniana. Ya me gustaría utilizar la palabra “arreglo”, pero de momento solo estamos hablando de la crisis.
Todo ello precisa de paciencia, tiempo, actitud muy sopesada y basada en el estudio de los hechos reales. Podemos ver, como la Administración actual está demostrando su disposición a alcanzar el objetivo planteado.
Evidentemente, estamos tan solo al principio del camino y de momento se están dando los primeros pasos. Hacemos comentarios sobre los éxitos alcanzados e informamos de manera abierta y bastante detallada a la opinión pública y a los medios. Tampoco ocultamos que sigue habiendo aspectos problemáticos que ni siquiera han empezado a ser abordados todavía.
Me gustaría volver a remitirle a la entrevista del Ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, concedida al periódico Kommersant y a sus otros discursos dedicados al tema en cuestión.
Continuamos manteniendo contactos con la parte estadounidense y transcurren en un ambiente de confianza. Podemos ver que en una serie de importantes temas están oyendo nuestra opinión. Suponemos que en base a la información facilitada, han empezado a entender mejor los aspectos determinados de la situación, así como nuestros razonamientos sobre la falta de alternativa a la eliminación de los motivos originarios de la crisis en Ucrania. La esencia de su pregunta fue comentada por el Presidente de Rusia, Vladímir Putin, en esta misma sala el 14 de junio de 2024. Antes que nada, se trata del intento de erradicar todo lo ruso y a toda la población rusa y de los planes de integrar a Ucrania en la OTAN.
Pregunta: La jefa en funciones de la delegación rusa en las negociaciones sobre seguridad militar y control de armamentos que se están celebrando en Viena, Yulia Zhdánova, dijo que la coalición occidental que les presta un apoyo abarcador a los neonazis de Kiev es integrada por unos 50 Estados. “No es nada sencillo vertebrar con ellos una comunicación constructiva en los debates en el marco del Foro de Cooperación en Materia de Seguridad de la OSCE”, manifestó la político.
¿Y es necesario hacerlo? ¿En qué ve la utilidad de este Foro? ¿Cómo evalúa el estado actual del “proceso lanzado en Helsinki” en la época soviética que se vio influenciado en gran medida por los resultados de la II Guerra Mundial?
Respuesta: Tras el cese, por iniciativa de los representantes de los países occidentales de las actividades del Consejo Rusia-OTAN, el Foro de Cooperación en Materia de Seguridad es casi el único canal de contactos militares y políticos multilaterales entre nuestro país y el llamado Occidente colectivo.
Tiene importancia de principio el hecho de que en las labores del Foro participan de manera igualitaria todos los Estados miembros de la OSCE, sin excepción alguna, siendo aplicado el principio clave de la Organización que es el consenso. Eso significa que nadie puede imponerle a Rusia, al igual que a cualquier otro Estado, una decisión inadmisible o pasar por alto nuestra opinión. En 2024, la presidencia danesa del Foro, en pleno apogeo de los ánimos rusófobos, intentó violar dicho principio, pero este intento fue abortado con determinación por la Federación de Rusia.
Al mismo tiempo, hemos de hacer constar que la remilitarización de la política y de la opinión pública en Europa está ejerciendo una influencia negativa en el Foro. Representantes de los países occidentales invierten un esfuerzo considerable en obstaculizar la realización del mandato del mismo, siendo su tarea principal el refuerzo de la seguridad y de la estabilidad vía negociaciones sobre medidas concretas del refuerzo de la confianza. Lo que estamos viendo en la práctica son unos procesos completamente opuestos: remilitarización, destrucción de la confianza y de los restos de los mecanismos que garantizaban la seguridad. Todo eso está conduciendo al abismo.
Les diré más: los representantes de Francia, Canadá, Polonia, los países del Báltico y demás figuras de ideas radicales buscan utilizar el Foro de Cooperación en Materia de Seguridad como plataforma de “lucha híbrida” contra Rusia. Se nos están echando flujos de desinformación, también relativa a la operación militar especial. Nos dedicamos a desmentir tales posturas, usando el espacio en cuestión, para difundir la información basada en los hechos reales y en información verificada.
Durante 3 años, presentamos en los foros de la OSCE cerca de 100 informes sobre la situación que se vive realmente en la zona de la operación militar especial y los crímenes de guerra cometidos por el régimen kievita, con la asistencia de sus patronos occidentales, también en la provincia de Kursk. Les hacemos a nuestros opositores a abrir los ojos y ver la verdad, por muy desagradable que sea para ellos. Hoy, es una circunstancia especialmente relevante, puesto que en Europa están casi silenciados los medios y las fuentes de información alternativas a la versión oficial presentada por la UE y la OTAN.
En más de una ocasión comentamos la profunda crisis que está atravesando en estos momentos la OSCE como organismo. Recordemos el discurso pronunciado por el Ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, pronunciando ante el Consejo de Ministros de Asuntos Exteriores en diciembre de 2024. El actual estado de las cosas en la Organización se debe a la idea fija de los países occidentales de someter dicho espacio a sus propios intereses y de usarlo como herramienta de presión. Ya hemos visto de todo en el marco de la puesta en práctica de la mencionada idea fija.
Lo más terrible es que estamos presenciando el alejamiento de los principios de la OSCE, la falta de respeto por los mecanismos, sobre los que se basa dicha organización, y los procesos que se desarrollan en su espacio, para la lucha contra los cuales fue creada. Por ejemplo, estamos viendo el incremento de los ánimos neonazis y la heroización del nazismo. En Occidente se intenta revisar los resultados de la Segunda Guerra Mundial, diluir la aportación decisiva del pueblo soviético en la Victoria, “blanquear” la reputación de los criminales nazis. La OSCE no solo se ve incapaz de luchar contra estas actitudes, sino que con su inacción facilita este comportamiento. Occidente no desea recordar las trágicas lecciones del pasado. Hasta que la OTAN y UE renuncien a sus juegos geopolíticos, la Organización, los cimientos de la cual fueron sentados, en forma del proceso de Helsinki, precisamente por la Victoria contra el nazismo lograda en 1945, no tendrá futuro. Lo importante es no solo mantener su forma, sino conseguir que sus contenidos empiecen a sanearse.